jueves, 29 de noviembre de 2007

Honrando a los miembros del Irgun asesinados por los británicos

LOS ACUSADOS SE CONVIERTEN EN ACUSADORES: las palabras de los jóvenes soldados del Irgún Tzvaí Leumí antes de ser ahorcados por los británicos
A mediados de marzo de 1947, los ingleses en Palestina sentenciaron a la horca a un miembro del grupo Stern (Moshé Barazani) y en abril a otro joven del Irgún: Meir Feinstein, quien fuera condenado a muerte por participar en la voladura de un depósito del ferrocarril de Jerusalén (utilizado por el régimen británico para transportar armas). Meir Feinstein, como todos los judíos acusados por los británicos, se negó a formar parte en los procedimientos del juicio y pronunció las siguientes palabras ante la “corte de justicia”:

“Oficiales del ejército invasor: un régimen basado en cadalsos, esa es la imagen que vosotros tenéis de este país, predestinado a servir de faro para la humanidad. Vuestra ceguera os hace creer que a través de un régimen así podréis conseguir quebrar el espíritu de nuestro pueblo. Pero muy pronto comprenderéis vuestro error, descubriréis que tenéis que quebrar acero, acero templado por el amor y el odio; amor a la patria y la libertad, y odio al invasor.
Debéis estar realmente ciegos. ¿No veis acaso contra quién tendréis que luchar? ¿Pensáis verdaderamente que nos asustaremos por los cadalsos? ¿Pensáis asustarnos a nosotros, acostumbrados a escuchar el chirrido de las ruedas de los coches en que transportaban a nuestros hermanos y padres, y a lo mejor de nuestro pueblo, a las cámaras de la muerte? A nosotros, que nos venimos repitiendo: por qué el destino nos dejó vivos en esta tierra y nos trató diferentemente a tantos de nuestros hermanos en Europa.
Y la respuesta para ello es sólo una: seguimos viviendo, pero no para hacerlo temiendo un nuevo Treblinka o agachando la cabeza ante nuestro verdugo. Quedamos con vida para asegurar que la vida, la libertad y el honor será nuestro próximo destino, y el de nuestra nación y el de la generación que tiene que nacer. Quedamos con vida para impedir que aquél horror se repita y suceda lo que pueda llegar a suceder bajo vuestro régimen de terror y sangre.
Aprendimos nuestra lección y pagaremos caro por ella. Pero hemos aprendido que hay un modo de vida que es peor que la muerte y que hay una muerte que es prerrequisito para la vida.
Si no sois capaces de ver que esta es una nación que no tiene otra cosa que perder más que los hierros de la esclavitud, nada más que la “esperanza” de otro Maidanek, entonces debéis estar enceguecidos por la Providencia que quiere haceros compartir el destino de todos los grandes imperios que lucharon contra el pueblo judío. Asiria, Babilonia, Atenas, Roma, España y Alemania trataron antes que ustedes y fracasaron. Vosotros compartiréis su tumba.
Eso es lo que quería deciros, a vosotros, oficiales británicos y a vuestros superiores. Quería deciros que fracasaréis al igual que Hitler. Que recuperaremos la dignidad robada al pueblo de Israel.
En cuanto a nosotros, sabemos muy bien como todo ello va en camino de terminarse. Sabemos que nuestro pueblo será libre y que sus opresores se verán obligados a retirarse con vergüenza. Estamos en calma, más aún somos felices. Pues no hay mayor felicidad para una persona, que saber con certeza que contribuye a la realización de un gran ideal.
Oíd, oficiales británicos, repetidlo a vuestros superiores, que están ciegos y no ven la inscripción en la pared, decidles que en este país ha nacido una nueva generación, de las cenizas de la Shoá ha nacido una nueva generación de judíos que ama la vida, pero ama más aún la libertad, una generación que terminará con la tiranía nazi-británica, una generación que dejará de temerle a sus perseguidores, una generación que enfrentará a sus enemigos y no se encerrará en guetos, una generación que conquistará su independencia al precio de su vida. Con sangre y fuego Judea cayó; con sangre y fuego Judea se levantará. Y el Dios que ayudó a David a vencer a Goliat, ayudará a los descendientes de David… ¡Viva el pueblo judío! ¡Viva la patria judía! ¡Viva la libertad!”.

No había pasado un mes de esta declaración y ya los británicos se preparaban para asesinar a esos dos luchadores judíos, Meir Feinstein y Moshé Barazani. El 23 de abril, debían marchar hacia el cadalso. Para mantenerlo en secreto, decidieron esta vez no llevar a los prisioneros a Acre. Para evitar que se repitiera la indignación causada por el hecho de no haber prestado asistencia religiosa a Gruner y sus camaradas antes de su ejecución (Dov Gruner había sido otro combatiente hebreo ahorcado por los británicos), esta vez los ingleses llamaron al rabino Goldman durante la noche y lo llevaron a la prisión de Jerusalén.
Mientras el rabino se preparaba para ir a la celda de los condenados, se arregló para decirle a su mujer que le alcanzara el libro en el que figuraba la oración por Sión. Ella comprendió, ya no bien su esposo abandonó la casa, lo que estaba sucediendo y le informó al Dr. Herzog sobre la inminencia de las ejecuciones.
Cuando los condenados vieron entrar en su celda al rabino, comprendieron que su fin se acercaba. Después del servicio religioso, el rabino permaneció con ellos conversando durante un cierto tiempo. Ellos lo instaron a regresar a su hogar y, al decirles el rabino Goldman que pensaba pasar la noche en la prisión y volvería a visitarlos, le rogaron que no lo hiciera. Entonces antes de que Goldman se retirara del lugar, le pidieron que fumara con ellos un cigarrillo y, en ese momento, probablemente lograron sacarle, sin que él se apercibiera, su cajita de fósforos; luego cantaron juntos el Hatikva y todos los prisioneros del lugar siguieron el himno con sus coros. Pocos minutos más tarde, mientras el rabino Goldman permanecía en la sala de espera, se oyó una terrible explosión.
El pánico cundió enseguida, pues en un primer momento se pensó que la prisión era atacada desde afuera. Poco después se vio una gruesa columna de humo, surgiendo de la celda de los dos jóvenes condenados. Al entrar en ella los oficiales británicos pudieron ver a Feinstein y Barazani abrazados sin vida en medio de un charco de sangre. Poco más tarde se dieron cuenta de que los jóvenes se habían explotado en sus corazones una granada que había sido ocultada en una naranja. En realidad los jóvenes pensaban en un principio utilizarla contra ellos mismos y sus verdugos al mismo tiempo, en el momento en que fueran llevados a la horca (como hizo Sansón con los filisteos), pero al ver que el rabino Goldman los iba a acompañar en su recorrido hasta el patíbulo, decidieron no hacer eso para evitar una muerte inocente, por lo que optaron por suicidarse dentro de la celda muriendo como héroes. Su heroísmo es motivo de orgullo hasta el día de hoy, representan el triunfo sobre el cadalso.

Evocación de los Héroes Muertos
El primer aniversario de la muerte de A. Habib, M. Nakar y Yacov Weiss (tres combatientes del Irgún ahorcados por los británicos a mediados de 1947), tuvo lugar pocos meses después de la declaración de independencia del Estado de Israel. Menajem Beguin, último comandante del Irgún Tzvaí Leumí durante la rebelión final, emergía de la clandestinidad y junto con centenares de soldados del Irgún (que luego se unieron a las filas del Ejército de Defensa de Israel), tomó parte de una peregrinación a las tumbas de estos mártires en Safed y pronunció allí este discurso:
“Hemos venido desde todos los rincones del país y aquí estamos de pie ante vosotros con nuestros corazones llenos de temblor, resignación y emoción. Hemos venido a informaros que el condenado brazo que os arrebató de entre nosotros está quebrado y que el opresor gobierno británico ha sido sacado de nuestra patria.
Los verdugos que os llevaron al cadalso han sido expulsados. El país está libre de la ocupación británica. Se han establecido las bases para la independencia judía. Ha surgido el Estado de Israel y miles de soldados judíos están listos para expulsar al enemigo actual y cumplir con la esperanza judía de independizar todo el territorio.
Valientes soldados se reunieron hoy, llegando desde Jerusalem, la Ciudad Eterna, desde Negba, desde el Norte, de la bulliciosa Tel Aviv, desde Natania, Haifa, la ciudad del futuro y de todos los confines de nuestra patria.
Valientes soldados: vuestros hermanos en armas, liberadores de la prisión de Acre y liberadores de la misma tierra a quienes vosotros defendisteis con vuestras vidas, todos ellos y nosotros, venimos hoy a traeros noticias de nuestra victoria.
Vuestro trabajo ha sido recompensado. Vuestro sacrificio no ha sido en vano. Vuestra sangre no fue derramada en vano! Pues habéis triunfado, pues el cruel enemigo que quiso exterminar a nuestro pueblo, fue finalmente detenido por vosotros y vuestros hermanos combatientes, siendo extirpado de nuestra tierra.
Vuestros hermanos os informan que vuestro sueño se ha visto cumplido. Tenemos hoy un ejército y un gobierno judío! Tenemos la esperanza de que nuestra generación contemple la liberación de todo vuestro territorio. No estáis solos en estos montes de Galilea. Vosotros decretasteis la suerte del opresor asaltando su bastilla. A vuestro lado descansan los cuatro hombres que fueron al cadalso con un canto de fe y libertad, y no lejos de aquí descansa vuestro otro hermano, el primero de nuestros mártires nacionales, el primero que cumplió con la consigna “Lamut o Lijbosh et Haar” (morir o conquistar la montaña), el gran Shlomo Ben Yosef.
No lejos de allí descansan los héroes de la Galilea que cayeron en la reciente guerra de independencia contra los invasores árabes y los que cayeron hace muchos años. Ninguno de ellos cedió antes de perder su última gota de sangre.
Seguramente conversáis entre vosotros durante las noche, vosotros los que moristeis con muerte de héroes en nuestro tiempo y los diez mártires de la antigüedad. Una cadena de oro os liga a todos. Por todas las noches, vuestras almas se comunican y conversan sobre el futuro de esa Galilea y de todo el país, y el futuro del pueblo eterno tan perseguido y tan tenaz.
Pero cuando vosotros habláis, no es la voz de la lamentación y la amargura la que se escucha, sino todo lo contrario, un himno de esperanza y de gloria se levanta hacia los cielos. En virtud de esa esperanza, es que surgieron en nuestros días héroes tales como ni se habían visto desde los días de Rabi Akiva y Bar Kojba (últimos rebeldes hebreos en caer ante el grito final de rebelión que lanzó Judea contra Roma). En virtud de esa esperanza se renovaron en nuestra patria esos días de gloria de nuestra antigüedad.
Desde las profundidades de la pena judía, surgieron los que asaltaron las fortalezas enemigas y aquellos que fueron al cadalso con una canción en sus labios.
Es por eso que las voces que se escuchaban aquí en la noche no son de lamentación, sino de alegría y júbilo, tanto las de vuestros jóvenes héroes actuales, como las de vuestros venerados padres.
Nosotros no avergonzamos a nuestros antepasados ni abandonamos la senda señalada por ellos. Y si muchos cayeron en el camino, otros ocuparon su lugar y levantaron bien alta la bandera de la liberación. Podemos pues informaros que la visión por la cual vosotros caísteis ha sido completamente realizada. Vosotros, montañas de Galilea, que habéis recibido los cuerpos de los héroes judíos durante setenta generaciones, sabed que os hemos liberado para siempre. Gracias a esa sagrada sangre, la corona del Hermón será vuestra.

Miembros y soldados del Irgún. Atención! Ante las tumbas de nuestros mártires juremos fidelidad a Jerusalem, liberada del todo y por cuya liberación ellos dieron la vida.
“Si yo te olvido, oh Jerusalem, séquese mi diestra”

lunes, 19 de noviembre de 2007

El Eje del Mal VI

La Estrategia de la Deslegitimación del Estado Judío (Parte 5)
Daniel Maoz
(daniel.maoz101@yahoo.com)

Introducción
En esta, mi ultima nota de investigación acerca de las diferentes estrategias que implementa el "eje del mal" contra el Estado de Israel y su sociedad.
Presentare, quizás, aquella estrategia que mayor polémica presenta, pero que, sin dudas, sus resultados son nebulosos, poco claros, e incluso convincentes para aquellos que no poseen información.
El objetivo a largo plazo de aquellos que han impuesto el odio como política es idéntica a la guerra de desgaste de los terroristas suicidas: cohetes y misiles y los secuestros de ciudadanos y soldados israelíes. La destrucción de Israel por todos los medios, incluso algunos de ellos, aceptados por la "comunidad internacional" como aquellas máximas entendidas en el marco de lo "políticamente correcto".
Este artículo intentará presentar, explicar y demostrar que la amenaza que pesa sobre el Estado de Israel no pasa sólo a través de las armas, sino también de las palabras y la diplomacia. Esta estrategia es la punta de lanza del eje Irán-Hamas, Hizballah y la Jihad Internacional (denominada popularmente "Al Qaeda")
Tres premisas de partida resultan necesarias para hacer frente a la amenaza existencial:

1- Aceptación racional que reza acerca de la legitimidad de existencia del Estado de Israel como Estado Judío.

2- El Estado de Israel debe gozar de buenas relaciones con la sociedad internacional en general, y con las comunidades judías en particular.

3- El Estado Judío surge en determinada constelación internacional a través de una votación de la comunidad internacional

La conclusión de estas tres premisas, teniendo en cuenta la amenaza actual, necesita de una estrategia común a ser implementada por la Diáspora Judía y el Estado de Israel: aunar fuerzas, comprender las amenazas y enfrentarlas

Desarrollo
Una peligrosa combinación de hechos en el terreno sufre Israel: la letal doctrina del régimen iraní, expresada en decenas de oportunidades en los últimos años, y el desarrollo de armamento nuclear por parte del mismo. Pero las reiteradas declaraciones del presidente iraní, Mahmud Ahjmadinejad, acerca la necesidad de "borrar al estado sionista del mapa", puede abrir más de una posibilidad, más allá del potencial peligro de uso de armamento atómico contra el Estado Judío. Si bien un artefacto nuclear, o varios de ellos, no logran la destrucción de un estado, la política de deslegitimación del eje del mal genera un peligro de índole existencial para Israel. Justamente, debido a que la amenaza de una bomba es visible, puede observarse, sentirse y medirse, tiende el ser humano a obviar las amenazas subliminales, aquellas que se ocultan detrás de conceptos, informaciones, fotografías.

"La Política de la Implosión"
La coalición de Deslegitimación del estado de Israel pone en peligro la existencia misma del Estado Judío. Esta coalición presenta diferentes y variados actores. Los actores principales son el fundamentalismo islámico, sunita (Hamas) y chiíta (Irán-Hizballah). El punto que esta en juego para ellos, que intentan demostrar como un mal generado a la humanidad, es el carácter judío del Estado de Israel. Es decir, no es la política de defensa de Israel la que es criticada, sino su mera existencia. Esto puede ser definido como "deslegitimación básica". Los fundamentos mismos del estado del pueblo judío son el objetivo a destruir.
El fenómeno de la implosión habla de la necesidad de generar la destrucción de Israel "desde adentro", es decir, no una fuerza militar será la que ponga fin a la existencia de Israel (ni siquiera un arma nuclear), sino la falta de legitimidad que caracterice la existencia de Israel en ojos de la sociedad israelí, de los pueblos de la región, las comunidades judías en el exterior y, por ultimo, la comunidad internacional.
La "coalición de deslegitimación del Estado de Israel" [1] (o más claramente "Antisionismo") está compuesta por embajadores o funcionario iraníes en diversos países, especialmente en Europa, América Latina, África y Lejano Oriente, grupos de "izquierda-fascista", intelectuales del mismo orden, que se proclaman abierta o sutilmente por la desaparición del Estado de Israel. Ejemplos de esta extraña unión ideológica entre "izquierdas" locales y un régimen totalitario como el régimen iraní, han sido revelados ante los ojos de las comunidades judías especialmente durante la guerra de Líbano, aunque se la puede apreciar desde el comienzo de la campaña de terrorismo contra la población civil israelí (denominada "intifada") desde el año 2000.
Esto nos lleva a entender la concepción del eje del mal y definirla en una sola frase: La concepción israelí de fortaleza nacional (democracia, sistema de vida libre, superioridad militar notable frente a ejércitos de países) es entendida como el punto de debilidad que conllevara a la destrucción de Israel (estrategias de desgaste ya presentadas como terror suicida, secuestros, misiles-morteros y propaganda que se transforma en "Deslegitimación Básica" del estado judío).

La Debilidad de la Democracia
La concepción teológica del "eje del mal" claramente contrapone el beneficio del carácter democrático-occidental del Estado Judío. Esta doctrina de pensamientos se refiere al carácter democrático de Israel como el elemento de debilidad que traerá su destrucción. Las discusiones publicas respecto a diferentes temas centrales en la sociedad israelí, como guerra de Líbano, concesiones territoriales, etc., son interpretadas en dicha teología como el talon de Aquiles que debe ser explotado (en doble sentido, claro) por los actores del eje. Las referencias del líder de Hizballah, Hassan Nassrallah, en diversas oportunidades especialmente desde el año 2000, hablan del fin del Estado Judío, justamente, generado desde su propio carácter democrático. La teoría de Nassrallah "telaraña de arañas", esbozada y propagada desde el 25 de Mayo de 2000 en la aldea sur libanesa Bint Jbeil, se concentra en la debilidad de la democracia israelí que demostró no estar dispuesta al esfuerzo y sacrificio de sus soldados en el sur libanés y opto por la retirada incondicional y unilateral, luego de 18 años de guerra de desgaste, terror y guerrillas del Hizballah. Es decir, la presión de la sociedad israelí sobre los lideres del país, dada las bajas de soldados en los combates del sur del Líbano (cerca de 30 soldados israelíes por año, excepto el año 1997), generó que por primera vez en la historia del país, un grupo terrorista consiguió el primero de sus objetivos, la retirada de Tzahal del sur libanés bajo fuego [2]. Esta discurso de Nassrallah volvió a repetirse decenas de veces hasta el año 2006, habiéndose convertido en punta de lanza para organizaciones fundamentalistas en vastas regiones, como Hamas, Jihad Islámica y Al Qaeda.
Para contraponer esta conceptualizacion del argumento sobre las debilidades de la democracia israelí, el punto más fuerte es el siguiente, incluso, genial desde el punto de vista del dictador iraní y sus aliados: la presión internacional sobre el Estado de Israel, ante la falta de solución del conflicto palestino-israelí, debería traer la verdadera solución al mismo. Dicha presión "moral" exigiría a Israel la anexión de millones de palestinos de la Autoridad Palestina (Gaza y Judea-Samaria o la Margen Occidental del Jordán). Elecciones democráticas "desde el mar al mar" (desde el Mar Muerto al Mar Mediterráneo") pondrían fin al carácter Judío del Estado de Israel. Aquí resulta necesario recordar el sueño del líder palestino "moderado" Yasser Arafat, quien se negó una y otra vez a la solución de "dos estados para dos pueblos".
El racional del "estado binacional", o fin del sueño judío de independencia nacional como cualquier otro pueblo, es, incluso y para sorpresa de muchos, apoyado por ciertos sectores judíos en el exterior e israelíes, quienes en nombre de la libertad y los derechos humanos hablan del fin de la legitima existencia del Estado Judío.
Estos argumentos nos llevan, pues, al concepto esgrimido anteriormente, "básica deslegitimación" del Estado de Israel. Los moderados palestinos de hoy día, es decir, el actual presidente Mahmud Abbas y sus lideres, hablan de la imposibilidad palestina de reconocer la legitima existencia de Israel como Estado Judío. Quizás, un aspecto semántico para algunos. Para otros, el mensaje que reza que la exigencia de "estado binacional" es una aspiración de la cúpula palestina moderada.
Por esta razón, el dictador iraní habla de "la caída del régimen sionista" como explicación a su doctrina de "borrar a Israel del mapa". Es decir, la explicación aceptada por ciertos sectores de la izquierda europea y Naciones Unidas se centra en un "conflicto político" entre el líder iraní e Israel. Estos líderes de derechos humanos, por supuesto, no se centran en la doctrina de odio y el disfraz de "lucha política" que impone el dictador de los Ayatollas iraníes….
En palabras del presidente iraní: "Todo aquel que es un ciudadano palestino, ya sea cristiano, judío o musulmán, deberá decidir en un referendo libre. Los habitantes de Palestina votaran quienes serán sus lideres y cual será el carácter del gobierno" (entrevista magazine Time, 16 de Diciembre de 2006).

Negación del Holocausto
He aquí la principal herramienta de la dictadura iraní y sus aliados en deslegitimar la existencia de Israel.

La concepción básica del fundamentalismo islámico parte de dos premisas:

1- El pueblo judío no tiene derecho histórico de poseer soberanía en Israel.

2- La causa del nacimiento de Israel se centra en la necesidad colonial de imponer una "cabeza de puente" en Medio Oriente, llamada Israel. Quizás, la causa de la necesidad europea de implantar un Estado Judío en Israel es intentar limpiar los exabruptos europeos contra los judíos (No se habla de Holocausto).

Ambas premisas tienen sus raíces bien grabadas en los sistemas educativos de sus respectivas sociedades. No en vano, el líder palestino Yasser Arafat se expreso públicamente en el mes de Agosto de 2000 diciendo que los judíos nunca construyeron sus dos templos en Jerusalén. Es decir, la relación judíos-Israel no pasa por un carril histórico .

Conclusión
La teoría de la Deslegitimación Básica de Israel se centra en los siguientes aspectos centrales:
Estrategias de combate asimétricas o no-convencionales (Martirio, Secuestro, Misiles-Cohetes-Mortero)
Estrategia de Propaganda que pone fin a la visión de legitimidad de existencia del estado de Israel como Estado Judío
Negación del Holocausto (que para aquellos que niegan la conexión milenaria del pueblo judío con la Tierra de Israel, erosionan la "conexión moral")
Imposición de una solución "binacional" (prevenir de Israel conseguir la solución en el marco de "dos pueblos, dos estados, ya aceptada por Israel en Noviembre de 1947 y rechazada desde entonces por el eje extremista árabe-islámico, a diferencia del Rey Abadía y su nieto, el Rey Hussein en el caso jordano y el Presidente Sadat en el caso de Egipto)
Imposibilidad de retiradas unilaterales de Israel para asegurar la existencia de un estado judío democrático que no anexe a 4 millones de palestinos (debido a que visión de retirada unilateral y su implementación genera una realidad en el terreno muy clara: la creación de entidades semi-estatales fundamentalistas islámicas que sirven de base de terror)
El objetivo del "eje del mal" iranio-sirio-hamas-hizballah y la jihad internacional es claro: Impedir que Israel logre una victoria militar decisiva en el campo de batalla a través de la utilización de herramientas no convencionales y a-simétricas. De esta manera, la capacidad militar israelí no podrá ponerse a mismo nivel del cohete primitivo o del secuestro de un soldado. La habilidad de la red del mal radica en conseguir que la fuerza militar de Israel no pueda expresarse en el campo de combate.
Desde el punto de vista de Israel, el mismo hecho de haber luchado frente al terrorismo suicida combatiéndolo desde Abril de 2002 y la decisión de responder ante el secuestro de Hizballah en Julio de 2006 dejaron en claro que Israel esta dispuesta a poner en riesgo la vida de sus ciudadanos y soldados para enfrentar este peligro existencial llamado "eje del mal". Mas allá de los errores de la guerra del pasado año, debemos interiorizar el hecho que aquel eje del mal entendió que la "debilidad" de la sociedad israelí tiene fin cuando ella entiende que se trata de una lucha por su mismísima existencia. Es en este momento, cuando la fortaleza de la sociedad democrática se pone de relieve y contiene al eje del mal. Deberíamos agregar, que justamente aquella "debilidad moral" (resaltada por Nassrallah y sus similares) de Israel en sus dilemas de lucha frente al terrorismo suicida y misilistico escondido en escuelas, mezquitas, aldeas y hospitales, ha superado con creces el desafío moral de defenderse del arrebato del eje del mal..

Daniel Maoz

www.porisrael.org

[1] Acerca de la estrategia de deslegitimar a la existencia del Estado de Israel, leer dos de los numerosos artículos en las siguientes páginas de institutos de investigación israelíes, en inglés:

http://reut-institute.org/Publication.aspx?PublicationId=361

[2] Para aquel que este interesado en conocer, justamente, las causas de por que el terrorismo puede y es vencido por la democracia israelí, puede acceder a mi articulo "Puede un Ejercito Convencional Derrotar al Terrorismo", situado en la siguiente dirección: http://www.hadar.org.ar (Información desde Israel) o en­:
http://www.hagshama.org.il/es/recursos/view.asp?id=2213

Gracias a la publicación de este artículo por Dori Lustron en http://porisrael.org/

lunes, 5 de noviembre de 2007

El Reino

Arabia Saudí se compra Hollywood
por Debbie Schlussel

Empezaré desde el final de la película "El Reino" para dar una idea general del argumento. No voy a reventarla. Es un comentario importante de la yuxtaposición de dos hombres, dos escenas, en la conclusión de la película.
En el final de "El Reino" se nos muestra a la familia de un líder terrorista recién abatido por el FBI en Arabia Saudí. La madre saudí pregunta a su hijo porqué no llora o muestra miedo después de acabar de ver el abatimiento a tiros de su abuelo líder terrorista a manos de los agentes del FBI, un negro y una mujer. El joven responde:
Me dijo, “No te preocupes, hijo mío. Los mataremos a todos”.
Entonces, la cámara gira al agente negro del FBI (Jamie Foxx), el principal agente del contraterrorismo implicado en la muerte del terrorista -- su raza es importante porque la mayoría de los negros en Arabia Saudí son esclavos y se les ve como inferiores, se les denomina “abed” (esclavo) incluso si no lo son. El joven hijo le pregunta qué dijo para confortar a la afligida hija de un agente del FBI asesinado en un atentado terrorista (cometido por el líder terrorista abatido). El agente del FBI (Foxx) informa a su hijo:
Le dije que los mataríamos a todos.
En última instancia, ese es el mensaje del thriller de suspense "El Reino". El principal agente del contraterrorismo del FBI y el jefe terrorista son moralmente equivalentes. Dicen lo mismo. Tienen el mismo mensaje. Ambos son asesinos. Uno no es mejor que el otro.
Pero aparte de eso, antes de que decida si ver o no la novedad fuertemente promocionada de "El Reino", debe hacer un cuestionario corto. Solamente tiene una pregunta:
¿Cuál de los sucesos siguientes forma parte de la vida real?:
Tras el atentado de 1996 contra las Torres Jobar, el Reino de Arabia Saudí permitió a un equipo de agentes del FBI ingresar en el país para investigar, un multimillonario príncipe saudí ayudó extensamente al FBI, y un coronel de la policía saudí ayudó con entusiasmo al FBI a rastrear a los asesinos terroristas dentro del Reino;
Una mujer norteamericana -- agente del FBI nada menos -- es autorizada para recorrer Arabia Saudí a lo largo y ancho vistiendo una camiseta muy ajustada de manga corta, mostrando todas sus armas (no me refiero a las de fuego), y sin nada que cubra su largo pelo suelto... portando una ametralladora en el proceso;
Un hombre judío -- agente del FBI nada menos -- es autorizado a entrar en el Reino de Arabia Saudí a pesar del hecho de que su abuela reside en Israel y de que tiene tres sellos de Israel en su pasaporte de tres viajes distintos para visitarla. Al preguntar si tiene "algún problema con eso", el funcionario de la policía saudí dice, "No es motivo de preocupación", y permite al judío americano de los sellos israelíes en su pasaporte el acceso al Reino, porque en realidad es una sociedad muy tolerante;
Solamente un reducido grupo característico de habitantes de Arabia Saudí es wahabí, siendo el resto musulmanes moderados que respetan la ley llevando una vida cotidiana en el Reino;
El director del FBI no cede a los musulmanes y no informa al fiscal general sobre ello, diciendo "No pediremos ayuda a la primera de cambio" si uno de sus agentes es abatido en un ataque terrorista saudí. Dice al fiscal pro-saudí, "El final se aproxima sin importar lo que hagamos. Lo único que importa es si luchas o te rindes". Él insiste en enviar a sus hombres al Reino para investigar y para llegar allí, hace que su principal agente (Jamie Foxx) chantajee y amenace al embajador y príncipe saudí que -- ¡vaya sorpresa! -- guarda un sorprendente parecido con el embajador saudí en Estados Unidos, el Príncipe Turki Al-Faisal.
¿Cuál de estas cinco circunstancias forman parte de la vida real? ¿Cuál ha sucedido realmente o sucedería en la realidad?
Si usted responde "Ninguna de las mencionadas", entonces está preparado para ir a ver "El Reino", pero no querrá perder su tiempo y 10 pavos para contemplar esta propaganda pro-saudí.
Si usted respondió que alguna de las circunstancias mencionadas es real, claramente es demasiado ignorante para asistir a un pase de la película. Se creerá cualquier cosa que Hollywood le ponga delante. Y es peligroso.
La verdad es que ninguno de los hechos mencionados forma parte de la vida real. Pero todo lo de arriba es retratado como auténtico en "El Reino”.
En la práctica, a pesar de muchas peticiones educadas y exigencias más fuertes, los saudíes NO PERMITIERON al FBI el acceso a Arabia Saudí después de que terrorista saudíes atacasen y asesinasen americanos en el atentado de las Torres Jobar. El FBI NO LOGRÓ INVESTIGAR la escena del crimen.
En la práctica, a las mujeres -- las mujeres norteamericanas atractivas con ametralladoras en particular -- no se les permite recorrer el país sin sus brazos totalmente cubiertos junto con su cuerpo y pelo. Eso no es lo que se nos muestra, con una agente del FBI interpretada por Jennifer Garner. La única indirecta es cuando el compañero agente del FBI Jamie Foxx le informa de que "Necesitas esconder las peras" con motivo de una cena con su aliado pro-americano el príncipe saudí, que se parece físicamente al multimillonario antiamericano saudí AlWalid Bin Talal.
En la práctica, mientras se permite el acceso a Arabia Saudí a unos cuantos judíos, NO SE PERMITE EL ACCESO A NINGÚN JUDÍO procedente de Israel con sellos en sus pasaportes. Eso es una condición estricta y se encuentra oficialmente redactada y ejecutada en el protocolo diplomático saudí. Los únicos autorizados a entrar con sello israelí en sus pasaportes son los musulmanes que residen en Israel o la Autoridad Palestina siempre que se encuentren en el Hajj, realizando la peregrinación a La Meca. Esa es la única excepción y es secreta. Aun así, la película tiene la ocurrencia de mostrarnos a un agente judío del FBI Jason Bateman (que debería haberse jubilado después de “Silver Spoons”) planteando la cuestión de su pasaporte con sello israelí, con los saudíes diciendo que no es motivo de preocupación. Qué cosas.
En la práctica, casi todos los saudíes son wahabíes, seguidores de las estrictas y extremistas enseñanzas de Mohammed Ibn Abd-Al-Wahhab. No hay ningún reducido grupo de radicales, como cualquier secta, que puedan pensar de esta manera y ser apartados. Todos piensan de esta manera (excepto en el caso de los contados chiítas oprimidos y perseguidos en el Reino -- que son igual de radicales, pero que no siguen a Ibn Abd-Al-Wahhab).
En la práctica, el director del FBI Robert Mueller ha hecho de no defender a sus agentes su política, pero en su lugar rinde pleitesía a los saudíes y sus bien financiados representantes en suelo americano. Obligó a su agencia a patrocinar sus actos y parte el pan con musulmanes americanos de financiación saudí vinculados a terroristas de la manera más contundente.
En lugar de informar al fiscal general de que "No pediremos ayuda a la primera de cambio", Mueller pide ayuda con cualquier excusa y pregunta a sus amigos islamistas por todo América de qué manera les gustaría responder en cada momento. Como para haber chantajeado a alguna vez a algún príncipe saudí embajador. Vaya timo. Su nariz es marrón de manera irreversible a causa de la frecuencia con la que les besa el culo.
El resto de la película es igualmente ridícula en sus falsedades. Vemos a un mando de la policía saudí ordenando a su coronel utilizar todas sus energías para "capturar a estos criminales" que asesinan americanos. Vaya vaya. Se nos muestran incesantes escenas de un coronel pro-americano de la policía saudí departiendo cariñosamente con sus hijas, después imágenes del agente del FBI Jamie Foxx llamando a su hijo. ¿Ve? Son exactamente iguales. Somos exactamente como los saudíes. Ellos quieren a sus hijos, exactamente igual que nosotros queremos a los nuestros. Al menos ese es el propagandístico mensaje de la película.
El coronel saudí, Faris Al-Ghazi, se hizo policía porque veía "El increíble Hulk" y "El hombre de los 6 millones de dólares" cuando era un niño. ¿La televisión saudí emitía estas series allá por entonces? Muy dudoso; pero ya ve -- somos exactamente iguales. El quiere "capturar a esos hombres que asesinaron personas inocentes [americanos]". Vea. Exactamente iguales, incluso veíamos los mismos programas de televisión mientras crecíamos.
Irónicamente, el actor que interpreta al amante de los americanos Al-Ghazi, Ashraf Barhom, es un cristiano israelí que interpretaba al líder terrorista palestino en la película pro-terroristas suicida “Paradise Now".
También se nos cuenta que "Los saudíes, al igual que los americanos, no hacen labores manuales. Piensan que ello les devalúa". ¿Ve? Somos exactamente iguales, comparación 5.376. En esta película la cosa sigue y sigue y sigue.
El director, Peter Berg, afirma que "El Reino" es "98% acción, 2% mensaje". Pero está mintiendo. Es 100 por 100 propaganda... con la acción pensada para facilitar lanzarse a la yugular americana.
Berg relataba a USA Today lo inquieto que se sintió cuando a audiencias norteamericanas les gusta la película y piensan que es patriótica (como el aplauso a este timo de película, como hizo la ignorante audiencia al verla en agosto):
Cuando un pase de prueba en Sacramento estalló en aplausos durante una escena de acción - él esperaba una reacción más melancólica - informó a los ejecutivos de Universal Studios que quería un pase para una audiencia de mayoría musulmana.
“No quería que esto fuera una película de 'América la justiciera'", dice. Quería acción, pero no acción jingoísta". Como he escrito en muchas ocasiones, "jingoísta" es el término que la izquierda de Hollywood utiliza para atacar al patriotismo americano.
Después de que una audiencia londinense diera una ovación a la escena, Berg decidía que la audiencia estaba animando una victoria sobre el terrorismo, no el nacionalismo (americano), así que conservó la escena.
Como he observado en columnas anteriores, estoy segura de que detrás de esta película está el dinero saudí. Al principio los saudíes tienen mala imagen en esta película, pero al final trabajan mano a mano con los americanos para "capturar a los terroristas". Así no es como sucede en la vida real. Pero ese es el mensaje que los saudíes viene intentando desesperadamente meter con calzador al público americano -- sin mucho éxito -- durante los 6 últimos años desde que 15 de sus paisanos asesinaran a casi 3000 americanos.
Ahora han descubierto una manera de hacerlo -- a través de una insidiosa película de suspense que apenas es una envuelta exterior para un caballo de Troya saudí.
Mientras que no puedo demostrar que la financiación saudí esté detrás de esta película, ya he documentado que asesores saudíes fueron consultados acerca del argumento de la película:
¿Cuánto dinero saudí o musulmán ha ído a financiar esta película propagandística? Me encantaría saberlo, pero los créditos no proporcionan este tipo de información. Lo que sí dicen es que dos saudíes, Yamen al-Hajjar y Ahmed Al-Ibrahim (que también participan en la película) son enumerados como consultores sobre árabe, islam y Arabia Saudí. Al-Hajjar es un nacional saudí que es estudiante de la Universidad de Boston y afirma que volverá al Reino tras licenciarse para trabajar para la compañía petrolera saudí Aramco. Estoy segura de que es imparcial en cuanto a su país natal y su "pacífica" religión.
Tras publicar esto, Al-Hajjar me envió un correo electrónico y estaba claramente enfadado. Creo que al exponer al público su implicación y sus conexiones con Arabia Saudí, dejé en evidencia su plan mismo.
Independientemente de si los saudíes invirtieron o no a manos llenas en la película, claramente obtuvieron lo que pagaron.
Y como vengo observando, Jamie Foxx se encuentra en nómina de la maquinaria propagandística islamista y está muy motivado para perpetrar el timo. Decía:
Bien, mi padre biológico es musulmán... Fue un soplo de aire fresco en contraposición a lo que se ve en televisión. Fue agradable ver la otra cara bajo una luz positiva.
No es aire fresco. Es la vieja propaganda pasada con un empaque nuevo y más inteligente.
No vaya a ver "El Reino". Pero si lo hace, asegúrese de llevar un pañuelo para la cabeza y esconder su pasaporte con sello israelí. Y no olvide el detector de mentiras.

domingo, 4 de noviembre de 2007

La batalla de las ideas

Occidente necesita su debate ideológico
George Chaya (http://porisrael.org/)

El sostenimiento de la libertad necesita forzosamente del debate ideológico. Los representantes políticos que en democracia niegan la importancia de la ideología, traicionan no sólo a los ciudadanos que los votan, sino a la raíz y al concepto mismo de la función política y a la democracia misma.
El mayor error de la civilización occidental es, a mi juicio, la negación de la ideología, es decir, la inacción para realizar un necesario debate de ideas. Todos los totalitarismos en la historia de la humanidad, incluidos los del siglo XX y los que presenciamos en los inicios de este siglo XXI, se han caracterizado precisamente por la negación a la sana batalla de las ideas. De igual modo, todas las tiranías de la historia y los grandes criminales y dictadores que el mundo ha conocido, temieron el debate ideológico y lo cercenaron con el fin de forzar su propio dictado a fuerza del poder de sus armas.
Al escribir sobre la necesidad de la ideología política pretendo significar la importancia de establecer un debate de ideas como medio fundamental para el avance de toda sociedad humana. De forma general, ideología significa el estudio de las ideas, vale decir, su origen, desarrollo y aplicación. Como definición amplia, puede entenderse como el conjunto de ideas fundamentales que caracteriza el pensamiento de un individuo, una sociedad, una época, un movimiento cultural, religioso o político.
Vivimos en el error de la negación ideológica y el panorama político internacional que presenciamos en esta primera década del siglo XXI confirma la necesidad de clarificar las ideas. En la confusión y mezcla ideológica que reina a nivel internacional hace falta generar un sano debate en el terreno de las propuestas y proyectos, es decir, plantear con nitidez en qué consiste la ideología que cada individuo o cada grupo político defiende. El espacio natural donde puede y debe tener lugar ese debate es el de las naciones donde existe auténtica libertad bajo un sistema democrático que permita e impulse dicho debate. La aceleración de la historia vivida desde el inicio del siglo XX y que prosigue en nuestros días corrobora una clara polarización de las ideas y los modos de entender el mundo. La ideología de los totalitarismos del siglo XX -desde el comunismo al fascismo- incluidas todas su vertientes estalinistas y nacional-socialistas fueron derrotadas por la ideología de las democracias liberales lideradas por Occidente. En otras palabras, la caída del Muro de Berlín significó en parte la derrota de una ideología -la socialista comunista- por parte de otra -la liberal- que resultó mucho más propicia para el avance real del ser humano y de sus libertades individuales en el marco del respeto de los derechos humanos.
Con todo, la supervivencia de varias dictaduras en el mundo confirma que aquella derrota de los totalitarismos fue parcial. De hecho, lo que vino después, en la última década del siglo XX -desde la Guerra de Irak en 1991 hasta hoy- ha ido abonando el campo para la confirmación definitiva del "choque de civilizaciones". El inicio de este siglo XXI es por tanto, una encrucijada clave para la historia de la humanidad porque además de ese choque de civilizaciones, no sólo en lo ideológico-político sino también en lo religioso, es visible también una fragmentación interior en el seno de algunas naciones, apreciables no solo en occidente sino en el mundo árabe.
La ola de violencia procedente del radicalismo en el Oriente Medio confirma una vez más la necesidad de hacer frente a quienes quieren cercenar la libertad y las bases democráticas sobre las que Occidente ha logrado los mayores avances para el bien de la humanidad. Nadie es ajeno a que el asesinato de más tres mil personas inocentes en Nueva York el 11 de septiembre de 2001 significó el inicio oficial de una guerra cruenta contemporánea contra los valores de la democracia y la libertad en el mundo. Por ello se debe entender y transmitir con claridad los peligros provenientes de los enemigos de la democracia y las libertades públicas e individuales no solo dentro de los Estados Unidos de América sino también, a nivel global.
Los verdaderos enemigos de la libertad, desde los líderes radicales de diversas latitudes y todos los autoritarismos que llevan la violencia como eje central de sus ideologías hasta los sectores que añoran el totalitarismo comunista (Corea del Norte, buena parte de la política China y Rusa pasando por el modelo castrista en Cuba y sus nuevos aliados latinoamericanos) estos fenómenos son significativos y centrales para exponer los peligros a los que occidente y la libertad de los individuos se enfrenta si se sigue ensanchando el error de la negación ideológica.
El problema actual en los EEUU radica en la cada vez más obvia polarización social, aspecto que a la larga, estará perjudicando su vida política nacional y su sociedad civil, sobre todo en los tiempos actuales de guerra contra el terrorismo global. Otros países pueden permitirse el lujo de polarizarse y dividirse ideológicamente, EEUU -como primera potencia mundial- no debería hacerlo. Se debería tener presente las palabras del general Giap de Vietnam del Norte cuando afirmaba que aunque a EEUU no se le podía derrotar en la guerra propiamente dicha, sí era posible hacerlo en su propia casa dividiendo a sus políticos. Aquella visión del Giap fue cierta en el caso de la Guerra de Vietnam, "perdida en Washington" por la división y el enfrentamiento de sus políticos y algunos medios de comunicación, que como sostienen muchos aun hoy, no estuvieron a la altura de las circunstancias.
Frente al permanente intento por desacreditar la ideología liberal a nivel internacional, tanto en EEUU como en Europa y otras partes del mundo, es de apreciar que la polarización, como muestra el caso de la política norteamericana actual ante la guerra contra el terror global es la confirmación de la cada vez más clara necesidad de acudir a la ideología como termómetro real de las propuestas políticas. Una ideología, que verifique la importancia de poder defender las ideas. Un espacio donde el ciudadano pueda entender cuáles son las propuestas de unos y de otros y así decidir cuál es la que más le interesa. Cada vez que esto ha ocurrido, el ideario liberal ha ganado abrumadoramente la batalla de las ideas, pese a las maquinarias propagandísticas contrarias. Eso ha sido posible, desde luego, en un país democrático como EEUU.
Lo que los comentaristas y analistas políticos en sumatoria no plantean, es precisamente lo que desde siempre he sostenido defendiendo la importancia de la defensa de la libertad sobre la base de un ideario claro y bien diseñado, sobre los fundamentos de una ideología reflexionada y pensada. Entre las ideologías que conocemos y que hemos experimentado, personalmente, juzgo sin temor a las críticas a la ideología liberal como la más adecuada en la defensa de las libertades y los derechos políticos, civiles y humanos.
Desde los totalitarismos -furibundamente anti-occidentales- que se aprecian en varias latitudes del planeta la ideología es demonizada. ¿Donde esta ubicado hoy el gobierno de Corea del Norte ideológicamente?, por citar un ejemplo. Reagan era un vaquero o un actor malo y George W. Bush es ahora un inculto o un analfabeto de derechas. Los "progresistas y los jihadistas" prefieren hablarnos de "diálogo", "apaciguamiento", "alianza de civilizaciones", "pragmatismo", "centrismo pacifista" y otras cuestiones de similares aspectos que para nada benefician el avance y la prosperidad en el mundo. Bajo esos términos, ese mismo progresismo desarrolla su propia ideología, que no es otra que liquidar y exterminar la ideología de la libertad de sus pueblos, única razón por la que nacieron las ideologías progresistas y las radicalizadas.
Este es el debate a clarificar y corregir, el de las ideas. Parece claro, que el "progresismo" de las izquierdas y el terrorismo ya se han encargado de borrar ese ficticio centro. En Oriente Medio, socialistas, nacional-socialistas, arabistas y yihadistas no tienen ningún pudor en autoproclamarse como personas "regionalistas desde lo ideológico" en tanto que los parlamentarios europeos y hasta los demócratas estadounidenses siguen predicando un irresoluto y poco claro centrismo, esa "moderación ineficiente", o a lo sumo ese "centro-derecha o centro-izquierda" es tan invisible como falaz. Por eso la necesidad de la ideología resulta ahora más obvia y necesaria que nunca.
En Occidente, la derecha y la izquierda deben aprender de sus aciertos y también de sus errores. Sin embargo, lo importante es la necesidad de vivir de acuerdo con su ideología natural, de forma clara y directa, explicando a la gente, abierta, honesta y apasionadamente, tanto en la teoría como en la práctica sus postulados. Es allí donde se debe clarificar el debate y donde se debe avanzar en la batalla de las ideas para hacer frente a las fallidas ideologías de los fanatismos, desde sus extremismos a los centrismos falsamente llamados "moderados" o "progresistas".
La exigencia de expresar una ideología, implica tener que exponer los aciertos históricos de las respectivas agendas políticas. La de los progresistas y los radicales, por mucho que quieran disfrazarlas, han sido y son las historias fracasadas de proyectos políticos que ha llevado a la postergación, la decadencia intelectual y moral, la miseria, el atraso, la muerte y el desastre de sus pueblos, sin ningún crédito ni futuro, se llame nacionalismo, arabismo, comunismo, progresismo, socialdemocracia o cualquiera de los eufemismos inventados.