Ciudadano Polanco. Control de la información.
Entre las personas de más influencia en España, en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús de Polanco Blanco.
Es el amo del grupo PRISA. Controla medios de comunicación como canal Plus, la cadena SER; radios musicales como cadena Dial, los 40, radio Olé...; también controla periódicos como EL PAIS, AS o Cinco Días...
http://www.esfazil.com/kaos/
"Nadie me ha dicho nunca que he publicado algo
indigno en los más de 40 años que llevo de editor".
“La democracia no peligra por la concentración de medios"
“El grupo PRISA se ha desarrollado al margen
de cualquier grupo de poder".
Jesús de Polanco
Entre las personas de más influencia en España, en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús de Polanco Blanco. Es el amo del grupo PRISA. Controla medios de comunicación como canal Plus, la cadena SER; radios musicales como cadena Dial, los 40, radio Olé...; también controla periódicos como EL PAIS, AS o Cinco Días. Su influencia se extiende, como accionista (en algunos casos mayoritario ) a hoteles, funerarias, agencias de viajes, librerías (Crisol), editoriales, gabinetes sociológicos, bancos...
El PAIS Surge del FRANQUISMO
En referencia a los grandes medios de comunicación, Juan Luis Cebrián dijo: “El público tiene derecho a saber cuánto ganan y cuánto deben, quienes son los dueños, quienes los financian y quienes los hacen"
Pues el público debe saber que el imperio forjado por Jesús de Polanco y el antiguo falangista Juan Luis Cebrián como lugarteniente, ha sido creado mediante la corrupción y el servilismo a los poderosos. Don Jesús, hizo fortuna durante el franquismo. Donde el dictador otorgó a dedo la exclusiva de libros de texto, en diversos lugares, a la editorial Santillana... y se incorporó al final del franquismo a las "ideas demócratas". Los que se sirvieron del régimen franquista querrán pasar a la historia como los adalides de una democracia por la que nunca lucharon. El coronel José Ignacio San Martín en su libro “Servicio Especial: A las órdenes de Carrero Blanco" en su galería de personajes hace este comentario del empresario Jesús de Polanco:
Algunos de mis colaboradores tendrían contactos con él, con motivo de la Operación “Promesa"( Promotora de Estudios Sociales) iniciada bajo la dirección de Manuel Fraga... No estaba , por supuesto , a favor del régimen , pero tampoco se mostró en abierta oposición al mismo... Se desenvolvía bien con algunos miembros del antiguo equipo de Fraga, especialmente con Pío Cabanillas y Carlos Robles Piquer. Este último, entre los años 1970 a 1973, trabajaba para Polanco en la Editorial Santillana."
Cuenta el periodista Jesús Cacho en su libro “El negocio de la libertad" que Cebrián se fue con Pío Cabanillas a dirigir RTVE en la España más lóbrega que imaginar se pueda, naturalmente en vida del dictador. Algunos le acusan de haber enviado a la Dirección General de Seguridad las películas filmadas con los rostros de quienes asistían a manifestaciones antifranquistas y/o acudían a Portugal al baño de alegría de la revolución de los claveles del 25 de abril?. Cebrián, el "niño bonito " de la prensa del Movimiento y director de informativos de la TVE de Franco, hoy metido a empresario de PRISA y a hasta consejero de Bankinter da lecciones de democracia en los foros internacionales.
Cebrián señaló el 2 de marzo de 1994, en Barcelona en un debate sobre «El papel de los medios de comunicación durante la transición» que «ABC es el representante más genuino de los cuarenta años de franquismo de este país porque nutrió ideológicamente a las fuerzas de la derecha española que desataron la Guerra Civil», y que la posición de ese periódico es «peligrosa porque genera un clima de guerra civil entre los ciudadanos». No olvidemos que el día que dieron el premio Nobel de literatura a Cela desde El País hubo un artículo acusándole de franquista. Don Francisco Franco, firmó de la mano de Fraga y su cuñadísimo Robles Piquer, la autorización del diario EL PAIS. Jesús de Polanco y Juan Luis de Cebrián son dos franquistas conversos al felipismo que no dudan en hacer negocio con porno duro en su televisión codificada y hacer pingües beneficios con la prostitución en sus páginas de anuncios ( el periódico de mayor número de anuncios de prostitución de toda la prensa española) que tienen la desfachatez de presumir de defensores de la libertad.¡ Y llamar amarillos a la competencia!..
EL FELIPISMO al servicio de POLANCO
Pero donde afianzó su poder e influencia fue durante la década de los 80, con la llegada al poder de Felipe González. La frase "Polanco es Dios y Felipe su profeta...", sintetiza perfectamente el papel jugado por Polanco durante el felipismo. El Grupo PRISA se convirtió en el adalid y defensor del gobierno González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que coexistía entorno a él. A cambio recibió todo tipo de prebendas, compensaciones económicas y privilegios.
El gobierno de Felipe González le vendió a un precio ridículo la cadena SER (cadena de radio que tenía una red espectacular de emisoras que cubrían todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar la competencia (el antenicidio). Se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. El canal plus era una fuente inmensa de beneficios para Polanco y que además no tenía competencia posible. En fin, que el Gobierno de Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía, tuvieron en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia, en la sociedad fue enorme al contar, en sus acciones, con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y la inmensa mayoría de los privados (quien osara enfrentarse al poder, lo pagaría caro...). Desde el Grupo Prisa se produjeron la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción felipista. Se intentó acallar los medios críticos e independientes. El felipismo necesitaba un escudo protector..., ese fue el Grupo PRISA. Incluso Juan Luis Cebrián, en nombre de El País, y otros veintiséis editores de periódicos y revistas europeos pedían al máximo órgano político de la Comunidad la desregulación de las normas sobre concentración de medios de comunicación. El ex comisario europeo responsable de la Competencia Karel Van Miert asegura en su libro "El Mercado y el poder" que en el último Gobierno de Felipe González, Solana y Solbes (acusado de corrupción en el caso Eurostat) le presionaron para que favoreciera a PRISA e ignorase la posible ilegalidad de su alianza con Telefónica en la sociedad Cablevisión.
La firma de acuerdos con casi todos los gobiernos de Iberoamérica ha catapultado a Jesús de Polanco, que ya controla el mercado de la comunicación en Iberoamérica. La conquista iberoamericana de Prisa se inspira en la misma política de hechos consumados que ya utilizó en España en Antena 3 Radio. Polanco trató de hacerse con el diario La Nación, tras mantener varios encuentros con el presidente de Chile, Ricardo Lagos, en compañía de Felipe González...
Es un vergüenza ver como uno partido denominado socialista y obrero se dedicó durante años a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco. Convertido en todo un señorito (de los de antes) con todo un partido político como el PSOE a su servicio. Don Jesús de Polanco, convertido por el felipismo triunfante en auténtico emperador, con una capacidad de decidir sobre los diversos aspectos de la vida española del modo arbitraria y según su conveniencia, domina con mano firme un imperio mediático que aspira a tener el control absoluto, el monopolio, de la información en nuestra sociedad; utilizando para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral... La existencia de este auténtico imperio del monopolio es básico para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del estado durante la década larga del felipismo.
El Club de BILDERBERG: Las reuniones secretas de la élite del poder
Poco antes de la muerte de Franco ( la inminencia de su fallecimiento era un hecho), en septiembre de 1975, se celebra en Palma de Mayorca una reunión del Club de Bilderberg, donde estuvo presente Nelson Rockefeller vicepresidente de EEUU, Joseph Luns el entonces secretario general de la OTAN , Alexander Haig, comandante en jefe de las fuerzas aliadas en Europa, etc. Trataron entre otros temas el de la situación de la península ibérica. Todos estuvieron de acuerdo en lo siguiente:
"Es indispensable contar en este país con un tipo de hombres nuevos, capaces de sustituir al franquismo sin trauma." Sin duda esto no era posible sin líderes que controlaran la opinión pública. Aquí jugará un papel determinante el diario El País. No olvidemos que este diario nace en el régimen franquista y es el primer diario de la transición que tuvo autorización, gracias al apoyo del ex ministro franquista Manuel Fraga, aunque su primer número saliese a la muerte de Franco. Fraga ha asistido en varias ocasiones a este club, una acompañado por Leopoldo Calvo Sotelo, otra en 1976, en Torquay, Inglaterra, el mismo año de la creación del periódico EL PAIS.
Tanto el consejero delegado de Prisa y ex director Cebrián, como el editor, Polanco, del diario "independiente" han tenido una relación muy estrecha con estos poderes a la sombra del Comisión Trilateral y del Club de Bilderberg. La presencia secreta de españoles en este poderoso lobby es muy reducida.. Las reuniones se cubren en el secreto y los participantes raramente revelan su asistencia, aunque la lista de este año incluye la asistencia de David Rockefeller y Henry Kissinger. Los críticos acusan a Bilderberg de ser siniestro y conspiracionista - si aquello que los delegados están discutiendo es realmente por el bien de la gente normal, se preguntan entonces ¿Por qué no pueden publicarlo?.
Entre los españoles asistentes este año pasado estaban Juan Luis Cebrián ( Grupo PRISA - El PAIS) y Matías Rodríguez Inciarte, Vicepresidente del SCH. España ha sido una vez sede de un encuentro del Club. En 1989, el Rey Juan Carlos y Felipe González diron la bienvenida al grupo en el balneario pontevedrés de La Toja. En aquella ocasión estuvieron presentes junto al el ex secretario general de la OTAN Lord Carrington, Jesús de Polanco y Miguel Boyer.
PRISA y la Masonería.
La fundación del ´CLUB DE BILDERBERG, y la TRILATERAL, es obra de masones que hasta cierto punto pueden dejar marcada la orientación de estos organismos. Según el teológo Manuel Guerra la vinculación del grupo PRISA con la masonería es ya un secreto a voces....y dice: "Para disipar cualquier duda residual más de un masón me ha confirmado esa vinculación de El País precisamente con la masonería irregular, la más anticristiana y tradicionalmente militante contra la Iglesia católica. Lo publican dos síntomas inequívocos de lo masónico, a saber, el silenciamiento de Jesucristo Dios y el ataque sistemático, a tiempo y a destiempo, contra la Iglesia, contra los miembros de la jerarquía católica, contra su doctrina dogmática, moral, etc. ¿Pero esto se debe a la condición masónica de Jesús Polanco, José Luis Cebrián, etc., los cuales, como es lógico, imprimen el sello masónico en sus medios de comunicación social o estos, además, merecen la calificación de organizaciones/pantalla de la masonería irregular?".
Jesús de Polanco en La Vanguardia (11/07/1994) decía cínicamente: “ Yo desafío a cualquiera a que demuestre que a alguien en PRISA le ha sido alguna vez limitado su libertad de expresión".
Elecciones Generales: PRISA 1, PP 0
Es verdad que Gobierno del PP mintió durante la guerra de Irak y ocultó a los autores del atentado consciente de la gravedad para sus resultados electorales. Pero también es verdad que la campaña que desde la CADENA SER, CNN + y El País se hizo durante el día de reflexión de las pasadas elecciones generales fue una manipulación de la opinión pública y una falta de mínima ética democrática al instrumentalizar el atentado terrorista para favorecer a una opción política (PSOE). El periodista Martín Prieto pregunta a la SER "¿Qué hicisteis con aquel cadáver de presunto kamikaze con el cuerpo rasurado y tres mudas puestas?. Hará bueno el dicho de Goebbels sobre que una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad. Polanco dijo que le daba lo mismo quién ganara estas últimas elecciones con tal de que no fuera Aznar . Viva el periodismo independiente. Verdaderamente el ganador de estas elecciones es el grupo PRISA. El PSOE, más que nunca, esta en manos de Polanco.
Se ha adulterado la democracia desde el monopolio informativo del Sr. Polanco al cual contribuyó a construir, estúpidamente, el propio Partido Popular . El Gobierno del PP ha hecho a Polanco en esta pasada legislatura numerosos favores. Autorizó, primero, la fusión entre Sogecable y Vía Digital. Cambió, después, de criterio en la Ley de Acompañamiento para regularizar las emisoras locales de TV de Prisa (Localia) y el Gobierno Popular ha venido boicoteando durante casi cuatro años la ejecución de la sentencia del Tribunal Supremo, que establecía como contraria a derecho la absorción de 81 emisoras de Antena 3 Radio por la Ser y, por tanto, obligaba a deshacer la operación.
En marzo de 2001 apareció publicada la lista de las 100 mayores fortunas de España que la revista Actualidad Económica realiza todos los años. Polanco con sus casi 400.000 millones de pesetas era ya uno de los hombres más ricos de España y por supuesto de los más poderosos.
AGUNOS DATOS DE INTERÉS
1. La fortuna de Polanco se valoró, sólo en Bolsa, en 398.442 millones de ptas. (año 2001).
2. Negociación con Franco y Pinochet para construir su imperio de Libros de Texto.
3. Tanto Polanco como Cebrián, primer director, han tenido permanentes contactos con los principales foros de decisión del neocapitalismo internacional como el Club de Bilderberg y la Comisión Trilateral.
4. Se ha servido de los gobiernos socialistas para hacer negocios: créditos FAD, publicidad estatal, la concesión fuera de plazo de la televisión codificada, la concentración radiofónica de la cadena Ser y Antena 3 Radio...
5. Los columnistas de El País se pueden meter con la Iglesia, el Gobierno o la Monarquía pero no lo pueden hacer con El Corte Inglés, que es la empresa de España que más interviene en publicidad.
6. La Banca Internacional ha estado dispuesta a financiarle créditos de hasta 60.000 millones de ptas., sólo por Canal Satélite.
7. El PP mantiene el trato de favor con hacienda que le concedió el PSOE permitiendo la fusión de las cadenas digitales, Canal Satélite y Sogecable, con unas excelentes condiciones.
8. Mantiene alianzas con AOL-Time Warner, Rupert Murdoch, Televisa.
9. POLANCO ES AMIGO DE FELIPE GONZÿLEZ, HA EXPULSADO AL JUEZ LIAÑO DE LA CARRERA JUDICIAL Y EJERCE UN CONTROL ESTRICTO SOBRE EL PSOE Y EN GENERAL SOBRE LA OPINIÓN LLAMADA "PROGRE" EN ESPAÑA
http://barcelona.indymedia.org
Jesús Polanco, ese hombre.
La frase, pronunciada a voz en grito en el restaurante Jockey de Madrid, retrata como pocas a su autor: Jesús Polanco Gutiérrez. Pero no solo a él, sino a la clase política nacida tras la Transición; tanto la retrata, que a los pocos meses de aquella bravuconada de sobremesa, el Gobierno de Felipe González concedía a Canal Plus licencia para emitir. Como ya avisó el baranda de Prisa, los socialistas no fueron capaces de decirle no. Era agosto de 1989.
El pasado 2 de junio, el Gobierno de Zapatero sacó adelante su ley para el impulso de la televisión digital terrestre. La norma, bautizada como ley Polanco, permite a Canal Plus emitir en abierto 24 horas al día.
De esta forma, Sogecable, titular de la cadena de pago, podría llevarse una buena porción de la tarta publicitaria, de la que tan necesitada está. Hoy como ayer, un Gobierno de la nación favorece descaradamente los intereses del grupo Prisa, la empresa ideológica de mayor envergadura que hay hoy en España y de la que es presidente Jesús Polanco.
Quién les iba a decir a los vecinos de Alcántara con Padilla que aquel muchacho con pinta de bruto, cabeza rapada hostil a asentamientos ilegales de liendres y piojos, aires marciales y ademanes impasibles, llegaría a ser uno de los hombres más importantes de España; que aquel chico que cada sábado partía de casa silbando marchas y serenatas rumbo a campamentos de hogueras nocturnas y montañas nevadas con su correaje, su camisa azul y sus pantalones cortos que dejaban al aire unas piernas llenas de pelos, sería conocido con los años como Jesús del Gran Poder.
Porque Polanco militó en el Frente de Juventudes, organización de adscripción voluntaria que encuadraba a los cachorros del régimen de Franco.
¿Polanco flecha? Como tantísimos españoles de la época. Sólo que mientras casi todos abandonaban las filas del Frente cuando desaparecían de su cara los rastros penosos del acné, Polanco permaneció en ellas hasta los treinta y tantos, según cuenta en sus divertidísimas memorias el que fue abogado de Banesto Rafael Pérez Escolar.
Teniendo en cuenta este testimonio y la definición que hacían los elementos más guasones de la oposición estiantifranquista del Frente de Juventudes (“unos niños disfrazados de gilipollas mandados por un gilipollas disfrazado de niño”), no es difícil imaginar el puesto que en el escalafón ocupaba Polanco.
Tantos años de vida en camaradería hicieron que el joven Polanco se desenvolviese con desparpajo en la mili.
Enseguida se erigió en campeón indiscutible de las batallas de almohadas que se organizaban por la noche en el barracón, tras el toque de silencio. Pero no fue en lo único en lo que destacó: sus compañeros le apodaron la Mona por la habilidad con que saltaba de litera en litera en pelota viva y picada.
Alguien que compartió con él arrestos, guardias e instrucción fue Leandro Ruiz Moragas, el bastardo real, que en sus memorias escribe: “No he visto los huevos de mis hijos tantas veces como he visto los de Jesús de Polanco en la Milicia Aérea Universitaria de Burgos”.
Donde apenas sobresalió Polanco fue durante la carrera de Derecho. No porque estuviera falto de inteligencia (ha demostrado tenerla y a toneladas), sino porque en el viejo caserón de la calle San Bernardo, sede entonces de la Facultad de Derecho, coincidió con auténticas lumbreras de la Ciencia Jurídica, como José María Ruiz-Gallardón y Federico Carlos Sainz de Robles, cuyas brillantes calificaciones eclipsaban a las del resto.
Además, a diferencia de muchos de sus compañeros, Polanco, huérfano de padre desde niño, tuvo que costearse los estudios vendiendo libros a domicilio, lo que le restaría tiempo para ir a clase.
De José Antonio a Marx.
Fuera de estos elementos atenuantes de su mediocre expediente, Polanco debió darse cuenta de que el Derecho no era lo suyo. Si no, no se explica que al licenciarse en 1953 no se encerrara en un cuarto a preparar unas oposiciones o entrara de pasante en un bufete de abogados. Lo que sí hizo fue meterse de lleno en el mundo editorial.
Durante años vivió modestamente con su mujer y sus hijos en un piso del barrio de la Concepción. Llegaban a fin de mes con los ingresos justos que al cabeza de familia le generaba la venta de cuadernillos de caligrafía y cartillas de alfabetización Santillana.
Hasta que se produjo el milagro: la reforma educativa del ministro Villar Palasí, concretada en la Ley General de Educación de 1970. Las biografías oficiales de Polanco dicen que la reforma promovida por Villar “estimuló al sector editorial y, lógicamente, a Santillana”; las no autorizadas, en cambio, apuntan a que la medida sólo enriqueció a Polanco y casi arruina a los demás.
En El negocio de la libertad (el mejor y más acabado perfil de Polanco y el grupo Prisa hecho hasta la fecha), Jesús Cacho apunta a que el secreto del éxito de esta operación tendría nombre, apellido y hasta mote: Ricardo Díez Hochtleiner, Jolines. Según Cacho, habría sido Jolines, subsecretario con Villar en Educación, quien hubiera pasado información al editor sobre el contenido de la reforma; con tanta celeridad que Santillana fue el único sello que tuvo listos con arreglo a la nueva ley los libros de textos el curso 1970/1971.
Este pelotazo, digno de figurar con honores en el Libro Guinnes de los Récords, fue el que le insufló a Polanco valor suficiente para “hacer las Américas”.
Sólo que a diferencia de los viejos indianos de antaño, en vez de El Musel partió desde Barajas. Eso sí, con un billete de vuelta y clase turista en el bolsillo.
Su primer negocio de éxito es en Chile. Al país andino seguirán Colombia, Venezuela, Argentina, México y Estados Unidos. Polanco ya se atreve con todo y no sólo con libros de texto y programas educativos.
Es en esta época cuando empieza a operar en él un cambio ideológico dirigido a borrar de su biografía toda mancha azul de pecado original falangista. Recuerda Rafael Pérez Escolar cómo cenando una noche en el Hotel Tamanaco de Caracas, Polanco defendió con denuedo las bondades del comunismo ante un auditorio compuesto por una treintena de compatriotas ojopláticos y boquiabiertos.
Aquel hombre rechoncho y simpático, estampa de la clase media española producto y sustento del franquismo, había desertado de las filas del bando nacional para engrosar las del republicano, sin pasar antes por el centro reformista aún no inventado por Aznar, en un vertiginoso ejercicio de trapecismo político sin red.
Años después, el de Prisa juraría al de Banesto no recordar aquella cena caraqueña en la que a los postres se habló de praxis, superestructuras y tigres de papel. Quien piense que Polanco es un chaquetero se equivoca.
Es como el señor del chiste, que justificaba sus bandazos ideológicos diciendo que lo que él había querido ser siempre era concejal, sin importarle el partido político. Polanco ha querido en la vida otra cosa que hacer negocios y pronto descubrió que la mejor forma de llevarlos a buen puerto era estando a bien con el poder, fuera del signo que fuera.
José Luis Martín Prieto cuenta una anécdota ilustrativa. Noche del 23-F de 1981. Se abre el telón y aparecen encerrados en un despacho Polanco, Cebrián y Martín Prieto, editor, director y subdirector, respectivamente, de El País. Discuten sobre cuál será la portada del día siguiente. El editor es partidario de esperar a ver de qué lado caen las cosas, mientras el director y su segundo lo son de salir a los quioscos dando vivas a la Constitución.
Al final se impone el criterio de los periodistas. De no haber sido por Janli y Emepe, quién sabe si Polanco no hubiera sacado en primera plana un retrato de Jaime Miláns del Bosch y, debajo, a grandes caracteres tipográficos, el siguiente titular: “A la orden de vuecencia, mi teniente general”. Se cierra el telón. Y llegó el día en que Polanco, como un Luis XIV cualquiera, descubrió que el poder era él. Ya no hacía falta adaptarse al medio. Ahora era el medio el que tendría que adaptarse a él.
¿Cuándo fue? No se sabe. Puede que durante aquella sobremesa en Amador de los Ríos, 6 en la que retó al Gobierno de Felipe a que le negara un canal de televisión; o la vez que, en un corrillo, tras una recepción, el Rey dijo algo y al darse cuenta de que estaba Polanco delante, apostilló “Siempre que don Jesús esté de acuerdo”; o la tarde que logró meter a empujones en la Española a Juan Luis Cebrián, notable periodista y pésimo escritor, cuya única aportación a la lengua es haber escrito en una novela clítoris acabado en x y no en s; o cuando a raíz del caso Sogecable demostró su capacidad de convocatoria sacando en El País un manifiesto de apoyo al grupo Prisa firmado, entre otros, por García Márquez y Los del Río, por Susan Sontang y las Azúcar Moreno; o el día en que Aznar, analizando ante sus derrotadas huestes los resultados de las elecciones de marzo, habló de un “poder fáctico fácilmente reconocible” por temor a decir Polanco.
"La barragana" del juez.
Cualquiera de estos momentos debió ser bueno para que el empresario se quitara de encima los complejos. Por eso, cuando el periodista e historiador Enrique de Aguinaga, joseantoniano décimo dan, le preguntó tras un almuerzo organizado por la Asociación de la Prensa de Madrid si era verdad que en su juventud había pertenecido al Frente de Juventudes, Polanco le respondió ufano: “Sí, sí, y además lo llevo muy a pecho”.
Y a ver quién se atreve a sacar un muñeco del guiñol suyo disfrazado de boy scout ideologizado cantando canciones de amor y guerra alrededor de una hoguera. Nadie. Porque los quebrantos que puede causar este hombre a quien ose cruzarse en su camino pueden ser letales (civilmente hablando, se entiende).
No paró hasta que apartaron de la judicatura por “prevaricador” a Javier Gómez de Liaño, juez de la Audiencia Nacional cuyos únicos delitos fueron instruir el sumario del caso de los depósitos de los abonados de Canal Plus y no amilanarse ante uno de los ataques más furibundos a la independencia judicial por parte del planeta Prisa y sus satélites.
Gómez de Liaño recuerda aquellos días con tristeza. “Nunca pensé que un grupo que se jacta de ser defensor de los derechos y libertades públicos entrara en detalles de la vida personal o familiar de un ciudadano para atacarlo”. A Liaño le consta por abochornadas fuentes del mismo grupo Prisa que aquellos días la consigna fue “cuanto más daño, mejor”.
Con Liaño valió entonces novia, hoy esposa, la fiscal María Dolores Márquez de Prado. Y es que basta una llamada de la planta noble de Prisa para que, en lo que dura un pestañeo, los redactores pasen de tener códigos deontológicos y libros de estilo delante a tenerlos detrás.
Que para tranquilizar las conciencias progres ya están las bulas de Tamayo, Floristán y Miret Magdalena, teólogos de cabecera del grupo Prisa. Pero lo duro es que en Gran Vía, 32 ni olvidan ni perdonan. “Hace poco” -sigue Liaño-, “para atacarme a mí volvieron a echar mano de María Dolores.
Y yo les pediría que en vez de estar tan pendientes de las mujeres de los demás se ocupen de las suyas, para evitarse sorpresas”.
No se refiere, por supuesto, el ayer juez y hoy abogado a la segunda esposa de Polanco, Luz Mari Barreiros, quien hará cosa de un año abandonó al empresario mediático por el hispanista Hugh Thomas. ¡Qué lejos quedan para muchos los años en los que la gente acudía a la oficina con El País doblado debajo del brazo, bien visible la cabecera, como marca de libertad! De libertad sin ira. Por no hablar de la SER.
Al confundir la realidad con el deseo, la emisora ha protagonizado los patinazos informativos más sonoros de los últimos años. Así, dio en exclusiva la noticia de que el sucesor designado por Aznar al frente del PP era Acebes... y resultó ser Rajoy. Y la noche americana del 2 de noviembre anunció, a un paso de que los colegios electorales echaran el cierre, una “marea favorable al candidato demócrata Kerry”... y ganó Bush.
Meses después, para recuperar el prestigio perdido, volvieron a sorprender a la audiencia con una exclusiva fruto de un largo trabajo de investigación: el nieto de la hermana de la madre del suegro de Zaplana tenía un restaurante en Alicante. Pero donde realmente se retrató la cadena fue dando la noticia de que en los trenes de la muerte del 11-M viajaban terroristas suicidas.
No era cierto. Pero no dejes que la realidad te estropee un buen reportaje o te haga perder unas elecciones. No rodaron cabezas en el grupo Prisa por la cobertura informativa del 11 al 14-M. Es más, en junta general de accionistas de abril de 2004, Polanco expresó su reconocimiento a los profesionales de El País, la SER y CNN+ por “su comportamiento en estas tensas y difíciles jornadas, por su dedicación, por su sentido de la responsabilidad y por el excelente trabajo desplegado”.
“Los injustificados y sectarios ataques de que fueron objeto” -añadió-, “por el simple hecho de haber servido a la verdad, sólo ponen de relieve la pequeñez moral de algunos sectores sociales, que aun pronunciándose con mucho ruido, no dejan de ser marginales”.
Y para que las palabras no se las llevara el viento, el jurado de los 51 Premios Ondas, que otorga la SER, galardonó el pasado octubre a sus propios servicios informativos por la labor informativa de aquellos días tremendos.
La réplica de la derecha al premio llegó a través de Aznar. Durante su comparecencia en la comisión de investigación del 11-M, el ex presidente del Gobierno dijo que aquello era como decir “miente, miente lo más miserablemente que puedas, todo lo que se te ocurra, con tal de servir a la causa, que serás recompensado e igual hasta te llevas un premio”.
Pero seguía sin atreverse a poner nombre y apellidos a ese “poder fáctico fácilmente reconocible” llamado Polanco. Ya en 1985 dijo Emilio Romero que Jesús Polanco era de los pocos hombres capaces de “glorificar, putear, encumbrar, descalificar, chulear, animar y amedrentar a una clase política entera”. Y tenía razón el gallo del franquismo.
De los grandes magnates de la prensa española, sólo a él cabe compararle, sin tropezar en la caricatura, con Ciudadano Kane, trasunto de William Randolph Hearst, interpretado por Orson Welles. Su poder es enorme. Abarca desde medios de comunicación hasta entidades financieras, pasando por sellos editoriales, agencias de viaje y publicidad, productoras de cine y música, y hasta cadenas de librerías, de bares, de hoteles y de hospitales.
Mucho se ha escrito (Federico Jiménez Losantos lo hizo en el epílogo de La dictadura silenciosa) sobre la posibilidad de nacer, crecer, reproducirse y morir en España bajo el influjo de este madrileño naturalizado cántabro.
Por eso, dicen, para redondear su negocio, a Polanco sólo le faltaría una compañía de pompas fúnebres. Y puestos a pedir una funeraria, por qué no un partido político. Aunque hay quien apunta que ya lo tiene: el PSOE. Para demostrarlo se atribuye a Rubalcaba la siguiente frase: “Prisa no es del PSOE, pero el PSOE si es de Prisa”.
Cierta o no la autoría, el portavoz parlamentario socialista niega ser el hombre del partido en el grupo, o del grupo en el partido. Sometido el flanco izquierdo, Polanco ha puesto proa al derecho: el PP.
De momento ha conseguido que sus dirigentes (no sus militantes) teman más un editorial de El País que el diagnóstico de un oncólogo. Y aunque el partido fundado por Manuel Fraga Iribarne no sea propiedad de Polanco, hubo momentos en los años de Aznar en que lo pareció.
Como muestras, hay botones para coser una casaca. Ahí van tres: las gestiones para que Janli Cebrián no ingresara en la cárcel por el caso Sogecable; la indolencia para hacer cumplir la sentencia del Supremo que obligaba a la SER a vender las emisoras ilegalmente adquiridas tras la compra de Antena 3; y la entrega a don Jesús del monopolio de la televisión digital.
Ante tanta merced Polanco supo corresponder con creces informando puntualmente de las manifestaciones de acoso a las sedes del PP la jornada de reflexión del 13 M. Quizás por eso los políticos de la derecha bajan avergonzados la mirada cada vez que en sus mítines las bases corean “¡Grupo Prisa, España no se pisa!”.
Porque saben que su cobardía ha sido causa del reclutamiento forzoso en los cuarteles del invierno mediático. Pero no todos agachan la cabeza. Hay uno que mira con abierto desdén a sus simpatizantes; simpatizantes que, por cierto, son los que le han hecho ganar por mayoría absoluta elección tras elección.
Es Alberto Ruiz-Gallardón, el hombre con quien sueña Polanco para liderar a la derecha. En él tiene puestas todas sus esperanzas. Y es que Polanco y Gallardón son amigos. Pero el lugar para hablar de esta amistad no es éste, sino el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
[Fuente: Por Gonzalo Altozano, Revista Epoca, Madrid, 27jun05]
http://www.derechos.org/
La MULTINACIONAL PRISA de JESÚS de POLANCO VIOLA la LEY y PERSIGUE a PERIODISTAS en BOLIVIA
La cadena internacional de medios de Difusión “PRISA” “penaliza” en Bolivia el “anuncio” de huelga, la actividad gremial y el fuero sindical de los periodistas, y no respeta las leyes bolivianas. Frente a estos hechos, en defensa de sus derechos y siguiendo el ascenso social de los trabajadores bolivianos, los periodistas sindicalizados han lanzado la consigna de “nacionalizar” las multinacionales de la comunicación, que se asentaron en el país de forma “solapada”. La guerra está declarada...
Miguel Pinto Parabá
http://www.fluvium.org
El terrorista que mató a Aznar
Miguel Salazar / Semanario Las Verdades de Miguel No.1 (Venezuela) - 26/03/04
Una conseja recorre al viejo Madrid, entre las letanías del fascismo decadente y la modernidad del terrorismo etarra: echando mano del ejemplo que en Caracas dieron las empresarios de la comunicación, al emperador de los medios españoles sólo le bastaron 24 horas para derrocar a José María Aznar sin disparar un tiro. Cuidado que la nueva subversión tiene en la mira a Venezuela.
La fortuna del nuevo dueño de Telcel alcanza cifras siderales en billete americano. Se trata del amo y señor de las almas españolas. Don Jesús Polanco y Blanco, como se le conoce con apellidos de abolengo incorporado, viene desde hace tiempo extendiendo sus tentáculos capitalistas por toda América Latina. De continuar su escalada como va, no está lejano el día cuando nos levantaremos con la familiaridad del acento ibérico tomando asiento en nuestros desayunos.
Entre los vericuetos del más moderno imperio de la información castiza, en el abigarrado mundo de sus propiedades, el amo de Telefónica ha resultado el verdadero artífice de la derrota del Partido Popular en España, José Aznar (enconado enemigo mediático de Hugo Chávez Frías) ha sufrido en carne propia el efecto del poder de la comunicación utilizado de manera perversa.
Por primera vez en la historia nacional los dueños de los medios de comunicación encuentran un verdadero peligro amenazando la libertad de informar, la libertad del editor y de todas las otras armas de los amos de la comunicación criolla y no es precisamente Chávez el motivo de la inqutetud empresarial. Se trata de Jesús Polanco, un español de antiguos devaneos con los tupamaros uruguayos y el extinto, argentino, Ejército Revolucionario del Pueblo. De aquel Regis Debray latino solo queda la sombra y hoy representa la pujanza del empresario sin escrúpulos, ejempto vivo del llamado liberalismo salvaje.
Nadie sabe cómo comenzó Polanco los riesgos de la aventura que lo elevó a la cúspide de los faraones de la comunicación y mucho menos cómo llegó a constituirse en una amenaza más seria que la representada por Bin Laden extrapolado a los predios de la información.
En realidad, Jesús Polanco se ha revelado en toda su dimensión de "terrorista comunicacional" y no es una exageración afirmar que haría morir de envidia hasta los más connotados extremistas de ese partido virtual que ha resultado la televisión privada. Polanco ya no puede ser un secreto y así ha quedado manifiesto desde el mismo momento cuando la terrible tragedia del plástico explosivo político detonó en el subterráneo madrileño la mañana del pasado 11 de marzo. A sólo horas de las elecciones españolas, las bombas de los nuevos cruzados del fanatismo le sirvieron de espoleta a Polanco para librar una onda expansiva que le daría la vuelta a la tortilla en el panorama político español, que para ese momento resultaba abiertamente favorable a Jóse María Aznar frente a su adversario José Rodríguez Zapatero del PSOE.
Aún no hemos llegado al esplendor del escándalo que tarde o temprano desatará la ambición de Jesús Polanco, pero la consigna "Que el Gobierno diga la verdad", es apenas el inicio del mando supremo en lo que queda del mundo socialista español.
El diario El País fue autorizado por Francisco Franco, a su dirección llega Polanco de la mano de Manuel Fraga. El futuro zar de la comunicación negoció con Franco y Pinochet la construcción de su imperio de libros de texto. Polanco ha mantenido contacto permanente con los principales foros de decisión del neocapitalismo internacional. Desde el mismo momento cuando arribó el primer Gobierno socialista español tejió la red de sus negocios que giraron en tomo a la publicidad estatal, la concesión fuera de plazo de la televisión codificada, la concentración radiofónica de la Cadena Ser y Antena 3 Radio.
El zar de la comunicación ha ejercido su oficio de manera férrea. Comenzó fijando las reglas del juego: los columnistas de El País se pueden meter con la Iglesia, el Gobierno o la monarquía, pero no to pueden hacer con El Corte Inglés ( la empresa de España que más invierte en publicidad).
La banca internacional le ha financiado créditos de hasta un mil millones de dólares. Pero si el mundo está a los pies de don Jesús, su fama de malagradecido ha crecido entre sus amigos. Mucho más ahora después de jugarle una mala pasada a José María Aznar, cuyo Partido Popular antes le había permitido la fusión de las Cadenas Digitales, Canal Satélite y Sogecable, con unas excelentes condiciones, al tiempo que aprovechaba para fortalecer sus alianzas con Aol-Time Warner, Rupert Murdoch y Tetevisa.
La falta de escrúpulos a la hora de sacrificar a sus amigos le ha permitido al Grupo Prisa (casa matriz de Jesús Polanco), protagonizar una importante subida en el parqué madrileño. En lo que va de año, el valor de sus títulos se incrementó 27,20 por ciento, casi el triple que el ibex-35. Sólo en el último mes, las acciones de Prisa subieron 34,53 por ciento. Los inversores también han sabido apreciar las buenas noticias que para la empresa de Polanco se han desprendido de la actuación del gobierno. Si hace apenas seis meses el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, anunciaba la inminente ilegalización de la red de emisoras locales de Prisa y Localia TV, ahora la situación es bien distinta; no sólo mantiene sus participaciones en Canal Plus y Localia (algo que estaba prohibido por ley) sino que además el gobierno de Aznar le permitió, a través de una enmienda de la ley de telecomunicaciones, la emisión de la programación en cadena en la red local de Prisa. Son conocidos sus lazos con el presidente argentino, Néstor Kirchner, a quien frecuenta acompañando en su nostalgia por los rnontoneros y revolucionarios, pero, por supuesto, sin la pobreza rancia cue acompañó aquella época.
Mientras, el editor español, que se jacta de ser un hombre progresista, ya no cree en la revolución social y cuando se la mencionan responde con grandes carcajadas. Don Jesús se dejó de sueños y se siente muy a gusto con el capitalismo: su filosofía más profunda es el libre mercado, pero en realidad es un amante del monopolio, por eso se entiende a las mil maravillas con Kirchner, quien además es un fanático lector de El País, el buque insignia de don Polanco.
La Casa Rosada le abrió las puertas de Argentina, de la misma manera que Felipe González (su mejor agente comercial) se la ha abierto en el México de Vicente Fox. Pero es tal la comunidad de intereses con el mandatario argentino que Polanco le solicitó su ayuda para adquirir Radio Continental. Kirchner no sólo te dio la mano sino que lo entusiasmó para que pusiera en marcha un diario en Argentina. En este momento, Polanco posee más de mil emisoras de radio en toda América Latina. El emperador de la guerra mediática considera que con su presencia en México, en Colombia (Radio Caracol) y Argentina, está preparado para incursionar en Venezuela, donde más de un editor importante está al borde de la quiebra. El eje Kirchner-Polanco no es sino una alianza mercantil y política. En ese sentido no se puede hablar de ideología, sino de poder y de dinero. En el portafolio de Polanco viene la descornposición de la unidad nacional, el envilecimiento de las instituciones y el freno a la posibilidad de regenerar la política y el Estado. Se trata pues de la intención de crear y fomentar la corrupción en la cumbre, la podredumbre de la justicia, y la anemia moral de los medios de comunicación de masas. Todo ello conduce a la desintegración de las reúblicas latinoamericanas.
El Grupo Prisa tiene relaciones con el venezolano clan Cisneros, ambos comparten una fuerte vinculación con las sociedades masónicas más atrasadas de Europa, con la llamada masonería irregular. Probablemente, el jefe del clan venezolano haya sido incorporado por Jesús Polanco porque anteriormente no se le conocian esas inclinaciones. Pero, lo cierto es que tanto Cisneros como Polanco le imprimen el sello masónico a sus medios de comunicación social. Digamos que practican una masonería invisible, por cuanto desarrollan actividades aparentemente ajenas a la masonería, pero a impulsos de los proyectos e ideal masónicos, aunque abiertas ordinariamente a no masones, su "filosofía" y sus directrices son masónicas.
Es muy probable que sus nexos los lleven a una sociedad secreta conocida como orden skull and bones (orden de la calavera y de los huesos), cuyo emblema es una calavera con dos huesos cruzados. En los últimos tiempos es llamada casi a secas: the order. Se trata de una hermandad fundada en la Universidad de Yate en 1832. Es una orden masónica independiente, es decir, no está inscrita en ninguna gran logia regular.
Jesús Polanco es amigo de Felipe González y ha usufructuado ese nexo para lograr la expulsión de jueces que no le son afectos en la carrera judicial, además ejerce un control estricto sobre el PSOE, y, en general, sobre la opinión llamada "progresista" en España.
No en balde Jesús Polanco se ha transformado en don Jesús de Polanco y Blanco. Todo depende de cómo se escriban los apellidos para saber de quién se trata la persona en una sociedad de trazos monárquicos. La influencia del "don" se extiende como accionista de hoteles, funerarias, agendas de viajes, librerías, editoriales, gabinetes sociológicosy bancos.
Curiosamente pocas personas saben quén es este buen señor ya que siempre ha permanecido en un segundo plano en cuanto a la popularidad, que no influencia, social. A pesar de ser una persona muy poco conocida para el gran público, su presencia en la vida cotidiana de los españoles medios es abrumadora.
Ya señalamos que don Jesús Polanco y Blanco hizo fortuna durante el franquismo, cuando el dictador le otorgó a dedo la exclusiva de libros de texto a la Editorial Santillana. Pero donde afianzó su poder fue durante la década de los 80, con la llegada al Gobierno de Felipe González. Entonces se hizo célebre la frase: "Felipe es Dios y Polanco su profeta". En ese tiempo el Grupo Prisa se convirtió en el primer defensor del gobierno de González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que se construyó bajo su mandato. La crítica a Polanco no es que sea rico o que tenga éxito en los negocios, no, se le cuestiona la forma cómo se ha enriquecido o ha hecho negocios, ayudado siempre desde el poder y con ventaja respecto a los otros competidores. Su modelo empresarial es el monopolio, no el libre mercado.
El gobierno le vendió a un precio irrisorio la cadena Ser (una red de radio que cubría todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar la competencia (el antenicidio); se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. Se trata del Canal Plus, el cual generó una fuente inmensa de beneficios para Polanco, por no contar además con una competencia posible. De tal manera que Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía, tuvo en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia en la sociedad es enorme al contar con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y privados.
Quien osara enfrentarse a su poder se estrellaría ante un colosal muro. Desde el Grupo Prisa se produjo la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción socialista. Así se acallo a los medios críticos e independtentes.
Durante años el PSOE se dedicó a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco, quien se convirtió en todo un auténtico emperador, con la capacidad de decidir de modo arbitrario sobre los diversos aspectos de la vida española. Dominó, según su conveniencia con mano firme un imperio mediático que se hizo del control absoluto de la información en España. Utilizó para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral. Conociendo su existencia es una tarea básica para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del Estado durante la década del PSOE.
La llegada al poder de José Marta Aznar y del Partido Popular constituyó una gran derrota para don Polanco. Desde entonces hizo todo lo que tuvo a su alcance para desacreditar a los dirigentes del PP. Bajo el gobierno de Aznar, el Grupo Prisa dejó de recibir la protección y la exclusividad que el PSOE le confirió en sus negocios. Ahora, cuando la venganza tiene un dulce sabor, Jesús Polanco sólo tiene una coincidencia con su adversario derrotado: cruzando el Atlántico, su hermano masón requiere de su ayuda.
http://www.soberania.org
¿Quién es el tal Polanco?
Tacuari
Agencias/Insurgente
Un tal Francisco Franco firmó de la mano de Fraga la autorización del diario El País... Hoy, entre las personas más influyentes del Estado Español en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús "de" Polanco Blanco [el nobiliario "de" es nuevo]. Es el amo del grupo PRISA.
Controla medios de comunicación como Canal Plus, la Cadena Ser; radios musicales como Cadena Dial, Los 40, Radio Olé. También controla periódicos como el citado El País, As, Cinco Días, así como prensa regional y local... Su influencia se extiende, como accionista (en algunos casos mayoritario) a hoteles, funerarias, agencias de viajes, librerías (Crisol), editoriales, gabinetes sociológicos, bancos, industria del cine...
Donde se afianzó su poder e influencia fue durante la década de los 80, con la llegada al poder de Felipe González. La frase “Polanco es Dios y Felipe su profeta...”, sintetiza perfectamente el papel jugado por Polanco durante el felipismo. El grupo PRISA se convirtió en el adalid y defensor del gobierno González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que coexistía en torno a él. A cambio recibió todo tipo de prebendas, compensaciones económicas y privilegios.
El gobierno de Felipe González le vendió a un precio ridículo la CADENA SER (cadena de radio que tenía una red espectacular de emisoras que cubrían todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar a la competencia (el antenicidio). Se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. El Canal Plus era una fuente inmensa de beneficios para Polanco y que además no tenía competencia posible.
El gobierno de Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía tuvieron en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia en la sociedad fue enorme al contar, en sus acciones, con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y la inmensa mayoría de los privados (quien osara enfrentarse al poder, lo pagaría caro...). Desde el Grupo Prisa se produjeron la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción felipista. Se intentó acallar los medios críticos e independientes. El felipismo necesitaba un escudo protector... Ese fue el Grupo PRISA. Incluso Juan Luis Cebrián, el hombre de El País y otros veintiséis editores de periódicos y revistas europeos pedían al máximo órgano político de la Comunidad Europea la desregulación de las normas sobre concentración de medios de comunicación. El ex comisario europeo responsable de la Competencia, Karel Van Miert, asegura en su libro “El Mercado y el poder” que en el último Gobierno de Felipe González, Solana y Solbes (acusado de corrupción en el caso Eurostat) le presionaron para que favoreciera a PRISA e ignorase la posible ilegalidad de su alianza con Telefónica en la sociedad de Cablevisión.
La firma de acuerdos con casi todos los gobiernos de Iberoamérica ha catapultado a Jesús de Polanco, que ya controla el mercado de la comunicación en Iberoamérica. La conquista latinoamericana de Prisa se inspira en la misma política de hechos consumados que ya utilizó en España en Antena 3 Radio. Polanco trató de hacerse con el diario La Nación, tras mantener varios encuentros con el presidente de Chile, Ricardo Lagos, en compañía de Felipe González... Su empresa esta extendida en México, Bolivia, y otros muchos empresarios progresistas, viajan a España con asiduidad buscando el apoyo financiero del super jefe.
Durante años el partido denominado socialista y obrero se dedicó a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco. Convertido en todo un señorito de los de antes, con todo un partido político como el PSOE a su servicio, don Jesús de Polanco, convertido por el felipismo triunfante en auténtico emperador, con una capacidad de decidir sobre los diversos aspectos de la vida española de modo arbitrario y según su conveniencia, domina con mano firme un imperio mediático que aspira a tener el control absoluto, el monopolio, de la información en nuestra sociedad; utilizando para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral... La existencia de este auténtico imperio del monopolio es básico para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del estado durante la década larga del felipismo.
Elecciones Generales: PRISA y PP
Es verdad que el Gobierno del PP mintió durante la guerra de Iraq y ocultó a los autores del atentado del 11M consciente de la gravedad para sus resultados electorales. Pero también es verdad que la campaña que desde la CADENA SER, CNN + y El País se hizo durante “el día de reflexión” de las pasadas elecciones generales fue una manipulación de la opinión pública y una falta de una mínima ética democrática al instrumentalizar el atentado terrorista para favorecer a la opción política del PSOE...
Polanco dijo que le daba lo mismo quien ganara estas últimas elecciones con tal que no fuera Aznar. El ganador de estas elecciones es el grupo PRISA. El PSOE, más que nunca, está en manos de Polanco.
Polanco contribuyó también a construir el propio Partido Popular. El Gobierno del PP ha hecho a Polanco en la pasada legislatura numerosos favores. Autorizó primero la fusión entre Sogecable y Vía Digital. Cambió después, de criterio en la “Ley de Acompañamiento” para regularizar las emisoras locales de TV de Prisa (Localia) y el Gobierno Popular ha venido boicoteando durante casi cuatro años la ejecución de la sentencia del Tribunal Supremo, que establecía como contraria a derecho la absorción de 81 emisoras de Antena 3 y Radio por la Ser y, por tanto, obligaba a deshacer la operación.
En marzo de 2001 apareció publicada la lista de las 100 mayores fortunas de España que la revista Actualidad Económica realiza todos los años. Polanco con sus casi 400.000 millones de pesetas era ya uno de los hombres más ricos de España y por supuesto de los más poderosos.
Jesús Polanco y Juan Luis Cebrián, dos franquistas conversos al felipismo, no dudan en hacer negocio con porno duro en su televisión codificada y hacer pingües beneficios con, por ejemplo, la prostitución (el periódico de mayor número de anuncios de prostitución de toda la prensa española: El País).
http://www.rebelion.org
Entre las personas de más influencia en España, en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús de Polanco Blanco.
Es el amo del grupo PRISA. Controla medios de comunicación como canal Plus, la cadena SER; radios musicales como cadena Dial, los 40, radio Olé...; también controla periódicos como EL PAIS, AS o Cinco Días...
http://www.esfazil.com/kaos/
"Nadie me ha dicho nunca que he publicado algo
indigno en los más de 40 años que llevo de editor".
“La democracia no peligra por la concentración de medios"
“El grupo PRISA se ha desarrollado al margen
de cualquier grupo de poder".
Jesús de Polanco
Entre las personas de más influencia en España, en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús de Polanco Blanco. Es el amo del grupo PRISA. Controla medios de comunicación como canal Plus, la cadena SER; radios musicales como cadena Dial, los 40, radio Olé...; también controla periódicos como EL PAIS, AS o Cinco Días. Su influencia se extiende, como accionista (en algunos casos mayoritario ) a hoteles, funerarias, agencias de viajes, librerías (Crisol), editoriales, gabinetes sociológicos, bancos...
El PAIS Surge del FRANQUISMO
En referencia a los grandes medios de comunicación, Juan Luis Cebrián dijo: “El público tiene derecho a saber cuánto ganan y cuánto deben, quienes son los dueños, quienes los financian y quienes los hacen"
Pues el público debe saber que el imperio forjado por Jesús de Polanco y el antiguo falangista Juan Luis Cebrián como lugarteniente, ha sido creado mediante la corrupción y el servilismo a los poderosos. Don Jesús, hizo fortuna durante el franquismo. Donde el dictador otorgó a dedo la exclusiva de libros de texto, en diversos lugares, a la editorial Santillana... y se incorporó al final del franquismo a las "ideas demócratas". Los que se sirvieron del régimen franquista querrán pasar a la historia como los adalides de una democracia por la que nunca lucharon. El coronel José Ignacio San Martín en su libro “Servicio Especial: A las órdenes de Carrero Blanco" en su galería de personajes hace este comentario del empresario Jesús de Polanco:
Algunos de mis colaboradores tendrían contactos con él, con motivo de la Operación “Promesa"( Promotora de Estudios Sociales) iniciada bajo la dirección de Manuel Fraga... No estaba , por supuesto , a favor del régimen , pero tampoco se mostró en abierta oposición al mismo... Se desenvolvía bien con algunos miembros del antiguo equipo de Fraga, especialmente con Pío Cabanillas y Carlos Robles Piquer. Este último, entre los años 1970 a 1973, trabajaba para Polanco en la Editorial Santillana."
Cuenta el periodista Jesús Cacho en su libro “El negocio de la libertad" que Cebrián se fue con Pío Cabanillas a dirigir RTVE en la España más lóbrega que imaginar se pueda, naturalmente en vida del dictador. Algunos le acusan de haber enviado a la Dirección General de Seguridad las películas filmadas con los rostros de quienes asistían a manifestaciones antifranquistas y/o acudían a Portugal al baño de alegría de la revolución de los claveles del 25 de abril?. Cebrián, el "niño bonito " de la prensa del Movimiento y director de informativos de la TVE de Franco, hoy metido a empresario de PRISA y a hasta consejero de Bankinter da lecciones de democracia en los foros internacionales.
Cebrián señaló el 2 de marzo de 1994, en Barcelona en un debate sobre «El papel de los medios de comunicación durante la transición» que «ABC es el representante más genuino de los cuarenta años de franquismo de este país porque nutrió ideológicamente a las fuerzas de la derecha española que desataron la Guerra Civil», y que la posición de ese periódico es «peligrosa porque genera un clima de guerra civil entre los ciudadanos». No olvidemos que el día que dieron el premio Nobel de literatura a Cela desde El País hubo un artículo acusándole de franquista. Don Francisco Franco, firmó de la mano de Fraga y su cuñadísimo Robles Piquer, la autorización del diario EL PAIS. Jesús de Polanco y Juan Luis de Cebrián son dos franquistas conversos al felipismo que no dudan en hacer negocio con porno duro en su televisión codificada y hacer pingües beneficios con la prostitución en sus páginas de anuncios ( el periódico de mayor número de anuncios de prostitución de toda la prensa española) que tienen la desfachatez de presumir de defensores de la libertad.¡ Y llamar amarillos a la competencia!..
EL FELIPISMO al servicio de POLANCO
Pero donde afianzó su poder e influencia fue durante la década de los 80, con la llegada al poder de Felipe González. La frase "Polanco es Dios y Felipe su profeta...", sintetiza perfectamente el papel jugado por Polanco durante el felipismo. El Grupo PRISA se convirtió en el adalid y defensor del gobierno González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que coexistía entorno a él. A cambio recibió todo tipo de prebendas, compensaciones económicas y privilegios.
El gobierno de Felipe González le vendió a un precio ridículo la cadena SER (cadena de radio que tenía una red espectacular de emisoras que cubrían todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar la competencia (el antenicidio). Se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. El canal plus era una fuente inmensa de beneficios para Polanco y que además no tenía competencia posible. En fin, que el Gobierno de Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía, tuvieron en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia, en la sociedad fue enorme al contar, en sus acciones, con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y la inmensa mayoría de los privados (quien osara enfrentarse al poder, lo pagaría caro...). Desde el Grupo Prisa se produjeron la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción felipista. Se intentó acallar los medios críticos e independientes. El felipismo necesitaba un escudo protector..., ese fue el Grupo PRISA. Incluso Juan Luis Cebrián, en nombre de El País, y otros veintiséis editores de periódicos y revistas europeos pedían al máximo órgano político de la Comunidad la desregulación de las normas sobre concentración de medios de comunicación. El ex comisario europeo responsable de la Competencia Karel Van Miert asegura en su libro "El Mercado y el poder" que en el último Gobierno de Felipe González, Solana y Solbes (acusado de corrupción en el caso Eurostat) le presionaron para que favoreciera a PRISA e ignorase la posible ilegalidad de su alianza con Telefónica en la sociedad Cablevisión.
La firma de acuerdos con casi todos los gobiernos de Iberoamérica ha catapultado a Jesús de Polanco, que ya controla el mercado de la comunicación en Iberoamérica. La conquista iberoamericana de Prisa se inspira en la misma política de hechos consumados que ya utilizó en España en Antena 3 Radio. Polanco trató de hacerse con el diario La Nación, tras mantener varios encuentros con el presidente de Chile, Ricardo Lagos, en compañía de Felipe González...
Es un vergüenza ver como uno partido denominado socialista y obrero se dedicó durante años a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco. Convertido en todo un señorito (de los de antes) con todo un partido político como el PSOE a su servicio. Don Jesús de Polanco, convertido por el felipismo triunfante en auténtico emperador, con una capacidad de decidir sobre los diversos aspectos de la vida española del modo arbitraria y según su conveniencia, domina con mano firme un imperio mediático que aspira a tener el control absoluto, el monopolio, de la información en nuestra sociedad; utilizando para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral... La existencia de este auténtico imperio del monopolio es básico para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del estado durante la década larga del felipismo.
El Club de BILDERBERG: Las reuniones secretas de la élite del poder
Poco antes de la muerte de Franco ( la inminencia de su fallecimiento era un hecho), en septiembre de 1975, se celebra en Palma de Mayorca una reunión del Club de Bilderberg, donde estuvo presente Nelson Rockefeller vicepresidente de EEUU, Joseph Luns el entonces secretario general de la OTAN , Alexander Haig, comandante en jefe de las fuerzas aliadas en Europa, etc. Trataron entre otros temas el de la situación de la península ibérica. Todos estuvieron de acuerdo en lo siguiente:
"Es indispensable contar en este país con un tipo de hombres nuevos, capaces de sustituir al franquismo sin trauma." Sin duda esto no era posible sin líderes que controlaran la opinión pública. Aquí jugará un papel determinante el diario El País. No olvidemos que este diario nace en el régimen franquista y es el primer diario de la transición que tuvo autorización, gracias al apoyo del ex ministro franquista Manuel Fraga, aunque su primer número saliese a la muerte de Franco. Fraga ha asistido en varias ocasiones a este club, una acompañado por Leopoldo Calvo Sotelo, otra en 1976, en Torquay, Inglaterra, el mismo año de la creación del periódico EL PAIS.
Tanto el consejero delegado de Prisa y ex director Cebrián, como el editor, Polanco, del diario "independiente" han tenido una relación muy estrecha con estos poderes a la sombra del Comisión Trilateral y del Club de Bilderberg. La presencia secreta de españoles en este poderoso lobby es muy reducida.. Las reuniones se cubren en el secreto y los participantes raramente revelan su asistencia, aunque la lista de este año incluye la asistencia de David Rockefeller y Henry Kissinger. Los críticos acusan a Bilderberg de ser siniestro y conspiracionista - si aquello que los delegados están discutiendo es realmente por el bien de la gente normal, se preguntan entonces ¿Por qué no pueden publicarlo?.
Entre los españoles asistentes este año pasado estaban Juan Luis Cebrián ( Grupo PRISA - El PAIS) y Matías Rodríguez Inciarte, Vicepresidente del SCH. España ha sido una vez sede de un encuentro del Club. En 1989, el Rey Juan Carlos y Felipe González diron la bienvenida al grupo en el balneario pontevedrés de La Toja. En aquella ocasión estuvieron presentes junto al el ex secretario general de la OTAN Lord Carrington, Jesús de Polanco y Miguel Boyer.
PRISA y la Masonería.
La fundación del ´CLUB DE BILDERBERG, y la TRILATERAL, es obra de masones que hasta cierto punto pueden dejar marcada la orientación de estos organismos. Según el teológo Manuel Guerra la vinculación del grupo PRISA con la masonería es ya un secreto a voces....y dice: "Para disipar cualquier duda residual más de un masón me ha confirmado esa vinculación de El País precisamente con la masonería irregular, la más anticristiana y tradicionalmente militante contra la Iglesia católica. Lo publican dos síntomas inequívocos de lo masónico, a saber, el silenciamiento de Jesucristo Dios y el ataque sistemático, a tiempo y a destiempo, contra la Iglesia, contra los miembros de la jerarquía católica, contra su doctrina dogmática, moral, etc. ¿Pero esto se debe a la condición masónica de Jesús Polanco, José Luis Cebrián, etc., los cuales, como es lógico, imprimen el sello masónico en sus medios de comunicación social o estos, además, merecen la calificación de organizaciones/pantalla de la masonería irregular?".
Jesús de Polanco en La Vanguardia (11/07/1994) decía cínicamente: “ Yo desafío a cualquiera a que demuestre que a alguien en PRISA le ha sido alguna vez limitado su libertad de expresión".
Elecciones Generales: PRISA 1, PP 0
Es verdad que Gobierno del PP mintió durante la guerra de Irak y ocultó a los autores del atentado consciente de la gravedad para sus resultados electorales. Pero también es verdad que la campaña que desde la CADENA SER, CNN + y El País se hizo durante el día de reflexión de las pasadas elecciones generales fue una manipulación de la opinión pública y una falta de mínima ética democrática al instrumentalizar el atentado terrorista para favorecer a una opción política (PSOE). El periodista Martín Prieto pregunta a la SER "¿Qué hicisteis con aquel cadáver de presunto kamikaze con el cuerpo rasurado y tres mudas puestas?. Hará bueno el dicho de Goebbels sobre que una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad. Polanco dijo que le daba lo mismo quién ganara estas últimas elecciones con tal de que no fuera Aznar . Viva el periodismo independiente. Verdaderamente el ganador de estas elecciones es el grupo PRISA. El PSOE, más que nunca, esta en manos de Polanco.
Se ha adulterado la democracia desde el monopolio informativo del Sr. Polanco al cual contribuyó a construir, estúpidamente, el propio Partido Popular . El Gobierno del PP ha hecho a Polanco en esta pasada legislatura numerosos favores. Autorizó, primero, la fusión entre Sogecable y Vía Digital. Cambió, después, de criterio en la Ley de Acompañamiento para regularizar las emisoras locales de TV de Prisa (Localia) y el Gobierno Popular ha venido boicoteando durante casi cuatro años la ejecución de la sentencia del Tribunal Supremo, que establecía como contraria a derecho la absorción de 81 emisoras de Antena 3 Radio por la Ser y, por tanto, obligaba a deshacer la operación.
En marzo de 2001 apareció publicada la lista de las 100 mayores fortunas de España que la revista Actualidad Económica realiza todos los años. Polanco con sus casi 400.000 millones de pesetas era ya uno de los hombres más ricos de España y por supuesto de los más poderosos.
AGUNOS DATOS DE INTERÉS
1. La fortuna de Polanco se valoró, sólo en Bolsa, en 398.442 millones de ptas. (año 2001).
2. Negociación con Franco y Pinochet para construir su imperio de Libros de Texto.
3. Tanto Polanco como Cebrián, primer director, han tenido permanentes contactos con los principales foros de decisión del neocapitalismo internacional como el Club de Bilderberg y la Comisión Trilateral.
4. Se ha servido de los gobiernos socialistas para hacer negocios: créditos FAD, publicidad estatal, la concesión fuera de plazo de la televisión codificada, la concentración radiofónica de la cadena Ser y Antena 3 Radio...
5. Los columnistas de El País se pueden meter con la Iglesia, el Gobierno o la Monarquía pero no lo pueden hacer con El Corte Inglés, que es la empresa de España que más interviene en publicidad.
6. La Banca Internacional ha estado dispuesta a financiarle créditos de hasta 60.000 millones de ptas., sólo por Canal Satélite.
7. El PP mantiene el trato de favor con hacienda que le concedió el PSOE permitiendo la fusión de las cadenas digitales, Canal Satélite y Sogecable, con unas excelentes condiciones.
8. Mantiene alianzas con AOL-Time Warner, Rupert Murdoch, Televisa.
9. POLANCO ES AMIGO DE FELIPE GONZÿLEZ, HA EXPULSADO AL JUEZ LIAÑO DE LA CARRERA JUDICIAL Y EJERCE UN CONTROL ESTRICTO SOBRE EL PSOE Y EN GENERAL SOBRE LA OPINIÓN LLAMADA "PROGRE" EN ESPAÑA
http://barcelona.indymedia.org
Jesús Polanco, ese hombre.
La frase, pronunciada a voz en grito en el restaurante Jockey de Madrid, retrata como pocas a su autor: Jesús Polanco Gutiérrez. Pero no solo a él, sino a la clase política nacida tras la Transición; tanto la retrata, que a los pocos meses de aquella bravuconada de sobremesa, el Gobierno de Felipe González concedía a Canal Plus licencia para emitir. Como ya avisó el baranda de Prisa, los socialistas no fueron capaces de decirle no. Era agosto de 1989.
El pasado 2 de junio, el Gobierno de Zapatero sacó adelante su ley para el impulso de la televisión digital terrestre. La norma, bautizada como ley Polanco, permite a Canal Plus emitir en abierto 24 horas al día.
De esta forma, Sogecable, titular de la cadena de pago, podría llevarse una buena porción de la tarta publicitaria, de la que tan necesitada está. Hoy como ayer, un Gobierno de la nación favorece descaradamente los intereses del grupo Prisa, la empresa ideológica de mayor envergadura que hay hoy en España y de la que es presidente Jesús Polanco.
Quién les iba a decir a los vecinos de Alcántara con Padilla que aquel muchacho con pinta de bruto, cabeza rapada hostil a asentamientos ilegales de liendres y piojos, aires marciales y ademanes impasibles, llegaría a ser uno de los hombres más importantes de España; que aquel chico que cada sábado partía de casa silbando marchas y serenatas rumbo a campamentos de hogueras nocturnas y montañas nevadas con su correaje, su camisa azul y sus pantalones cortos que dejaban al aire unas piernas llenas de pelos, sería conocido con los años como Jesús del Gran Poder.
Porque Polanco militó en el Frente de Juventudes, organización de adscripción voluntaria que encuadraba a los cachorros del régimen de Franco.
¿Polanco flecha? Como tantísimos españoles de la época. Sólo que mientras casi todos abandonaban las filas del Frente cuando desaparecían de su cara los rastros penosos del acné, Polanco permaneció en ellas hasta los treinta y tantos, según cuenta en sus divertidísimas memorias el que fue abogado de Banesto Rafael Pérez Escolar.
Teniendo en cuenta este testimonio y la definición que hacían los elementos más guasones de la oposición estiantifranquista del Frente de Juventudes (“unos niños disfrazados de gilipollas mandados por un gilipollas disfrazado de niño”), no es difícil imaginar el puesto que en el escalafón ocupaba Polanco.
Tantos años de vida en camaradería hicieron que el joven Polanco se desenvolviese con desparpajo en la mili.
Enseguida se erigió en campeón indiscutible de las batallas de almohadas que se organizaban por la noche en el barracón, tras el toque de silencio. Pero no fue en lo único en lo que destacó: sus compañeros le apodaron la Mona por la habilidad con que saltaba de litera en litera en pelota viva y picada.
Alguien que compartió con él arrestos, guardias e instrucción fue Leandro Ruiz Moragas, el bastardo real, que en sus memorias escribe: “No he visto los huevos de mis hijos tantas veces como he visto los de Jesús de Polanco en la Milicia Aérea Universitaria de Burgos”.
Donde apenas sobresalió Polanco fue durante la carrera de Derecho. No porque estuviera falto de inteligencia (ha demostrado tenerla y a toneladas), sino porque en el viejo caserón de la calle San Bernardo, sede entonces de la Facultad de Derecho, coincidió con auténticas lumbreras de la Ciencia Jurídica, como José María Ruiz-Gallardón y Federico Carlos Sainz de Robles, cuyas brillantes calificaciones eclipsaban a las del resto.
Además, a diferencia de muchos de sus compañeros, Polanco, huérfano de padre desde niño, tuvo que costearse los estudios vendiendo libros a domicilio, lo que le restaría tiempo para ir a clase.
De José Antonio a Marx.
Fuera de estos elementos atenuantes de su mediocre expediente, Polanco debió darse cuenta de que el Derecho no era lo suyo. Si no, no se explica que al licenciarse en 1953 no se encerrara en un cuarto a preparar unas oposiciones o entrara de pasante en un bufete de abogados. Lo que sí hizo fue meterse de lleno en el mundo editorial.
Durante años vivió modestamente con su mujer y sus hijos en un piso del barrio de la Concepción. Llegaban a fin de mes con los ingresos justos que al cabeza de familia le generaba la venta de cuadernillos de caligrafía y cartillas de alfabetización Santillana.
Hasta que se produjo el milagro: la reforma educativa del ministro Villar Palasí, concretada en la Ley General de Educación de 1970. Las biografías oficiales de Polanco dicen que la reforma promovida por Villar “estimuló al sector editorial y, lógicamente, a Santillana”; las no autorizadas, en cambio, apuntan a que la medida sólo enriqueció a Polanco y casi arruina a los demás.
En El negocio de la libertad (el mejor y más acabado perfil de Polanco y el grupo Prisa hecho hasta la fecha), Jesús Cacho apunta a que el secreto del éxito de esta operación tendría nombre, apellido y hasta mote: Ricardo Díez Hochtleiner, Jolines. Según Cacho, habría sido Jolines, subsecretario con Villar en Educación, quien hubiera pasado información al editor sobre el contenido de la reforma; con tanta celeridad que Santillana fue el único sello que tuvo listos con arreglo a la nueva ley los libros de textos el curso 1970/1971.
Este pelotazo, digno de figurar con honores en el Libro Guinnes de los Récords, fue el que le insufló a Polanco valor suficiente para “hacer las Américas”.
Sólo que a diferencia de los viejos indianos de antaño, en vez de El Musel partió desde Barajas. Eso sí, con un billete de vuelta y clase turista en el bolsillo.
Su primer negocio de éxito es en Chile. Al país andino seguirán Colombia, Venezuela, Argentina, México y Estados Unidos. Polanco ya se atreve con todo y no sólo con libros de texto y programas educativos.
Es en esta época cuando empieza a operar en él un cambio ideológico dirigido a borrar de su biografía toda mancha azul de pecado original falangista. Recuerda Rafael Pérez Escolar cómo cenando una noche en el Hotel Tamanaco de Caracas, Polanco defendió con denuedo las bondades del comunismo ante un auditorio compuesto por una treintena de compatriotas ojopláticos y boquiabiertos.
Aquel hombre rechoncho y simpático, estampa de la clase media española producto y sustento del franquismo, había desertado de las filas del bando nacional para engrosar las del republicano, sin pasar antes por el centro reformista aún no inventado por Aznar, en un vertiginoso ejercicio de trapecismo político sin red.
Años después, el de Prisa juraría al de Banesto no recordar aquella cena caraqueña en la que a los postres se habló de praxis, superestructuras y tigres de papel. Quien piense que Polanco es un chaquetero se equivoca.
Es como el señor del chiste, que justificaba sus bandazos ideológicos diciendo que lo que él había querido ser siempre era concejal, sin importarle el partido político. Polanco ha querido en la vida otra cosa que hacer negocios y pronto descubrió que la mejor forma de llevarlos a buen puerto era estando a bien con el poder, fuera del signo que fuera.
José Luis Martín Prieto cuenta una anécdota ilustrativa. Noche del 23-F de 1981. Se abre el telón y aparecen encerrados en un despacho Polanco, Cebrián y Martín Prieto, editor, director y subdirector, respectivamente, de El País. Discuten sobre cuál será la portada del día siguiente. El editor es partidario de esperar a ver de qué lado caen las cosas, mientras el director y su segundo lo son de salir a los quioscos dando vivas a la Constitución.
Al final se impone el criterio de los periodistas. De no haber sido por Janli y Emepe, quién sabe si Polanco no hubiera sacado en primera plana un retrato de Jaime Miláns del Bosch y, debajo, a grandes caracteres tipográficos, el siguiente titular: “A la orden de vuecencia, mi teniente general”. Se cierra el telón. Y llegó el día en que Polanco, como un Luis XIV cualquiera, descubrió que el poder era él. Ya no hacía falta adaptarse al medio. Ahora era el medio el que tendría que adaptarse a él.
¿Cuándo fue? No se sabe. Puede que durante aquella sobremesa en Amador de los Ríos, 6 en la que retó al Gobierno de Felipe a que le negara un canal de televisión; o la vez que, en un corrillo, tras una recepción, el Rey dijo algo y al darse cuenta de que estaba Polanco delante, apostilló “Siempre que don Jesús esté de acuerdo”; o la tarde que logró meter a empujones en la Española a Juan Luis Cebrián, notable periodista y pésimo escritor, cuya única aportación a la lengua es haber escrito en una novela clítoris acabado en x y no en s; o cuando a raíz del caso Sogecable demostró su capacidad de convocatoria sacando en El País un manifiesto de apoyo al grupo Prisa firmado, entre otros, por García Márquez y Los del Río, por Susan Sontang y las Azúcar Moreno; o el día en que Aznar, analizando ante sus derrotadas huestes los resultados de las elecciones de marzo, habló de un “poder fáctico fácilmente reconocible” por temor a decir Polanco.
"La barragana" del juez.
Cualquiera de estos momentos debió ser bueno para que el empresario se quitara de encima los complejos. Por eso, cuando el periodista e historiador Enrique de Aguinaga, joseantoniano décimo dan, le preguntó tras un almuerzo organizado por la Asociación de la Prensa de Madrid si era verdad que en su juventud había pertenecido al Frente de Juventudes, Polanco le respondió ufano: “Sí, sí, y además lo llevo muy a pecho”.
Y a ver quién se atreve a sacar un muñeco del guiñol suyo disfrazado de boy scout ideologizado cantando canciones de amor y guerra alrededor de una hoguera. Nadie. Porque los quebrantos que puede causar este hombre a quien ose cruzarse en su camino pueden ser letales (civilmente hablando, se entiende).
No paró hasta que apartaron de la judicatura por “prevaricador” a Javier Gómez de Liaño, juez de la Audiencia Nacional cuyos únicos delitos fueron instruir el sumario del caso de los depósitos de los abonados de Canal Plus y no amilanarse ante uno de los ataques más furibundos a la independencia judicial por parte del planeta Prisa y sus satélites.
Gómez de Liaño recuerda aquellos días con tristeza. “Nunca pensé que un grupo que se jacta de ser defensor de los derechos y libertades públicos entrara en detalles de la vida personal o familiar de un ciudadano para atacarlo”. A Liaño le consta por abochornadas fuentes del mismo grupo Prisa que aquellos días la consigna fue “cuanto más daño, mejor”.
Con Liaño valió entonces novia, hoy esposa, la fiscal María Dolores Márquez de Prado. Y es que basta una llamada de la planta noble de Prisa para que, en lo que dura un pestañeo, los redactores pasen de tener códigos deontológicos y libros de estilo delante a tenerlos detrás.
Que para tranquilizar las conciencias progres ya están las bulas de Tamayo, Floristán y Miret Magdalena, teólogos de cabecera del grupo Prisa. Pero lo duro es que en Gran Vía, 32 ni olvidan ni perdonan. “Hace poco” -sigue Liaño-, “para atacarme a mí volvieron a echar mano de María Dolores.
Y yo les pediría que en vez de estar tan pendientes de las mujeres de los demás se ocupen de las suyas, para evitarse sorpresas”.
No se refiere, por supuesto, el ayer juez y hoy abogado a la segunda esposa de Polanco, Luz Mari Barreiros, quien hará cosa de un año abandonó al empresario mediático por el hispanista Hugh Thomas. ¡Qué lejos quedan para muchos los años en los que la gente acudía a la oficina con El País doblado debajo del brazo, bien visible la cabecera, como marca de libertad! De libertad sin ira. Por no hablar de la SER.
Al confundir la realidad con el deseo, la emisora ha protagonizado los patinazos informativos más sonoros de los últimos años. Así, dio en exclusiva la noticia de que el sucesor designado por Aznar al frente del PP era Acebes... y resultó ser Rajoy. Y la noche americana del 2 de noviembre anunció, a un paso de que los colegios electorales echaran el cierre, una “marea favorable al candidato demócrata Kerry”... y ganó Bush.
Meses después, para recuperar el prestigio perdido, volvieron a sorprender a la audiencia con una exclusiva fruto de un largo trabajo de investigación: el nieto de la hermana de la madre del suegro de Zaplana tenía un restaurante en Alicante. Pero donde realmente se retrató la cadena fue dando la noticia de que en los trenes de la muerte del 11-M viajaban terroristas suicidas.
No era cierto. Pero no dejes que la realidad te estropee un buen reportaje o te haga perder unas elecciones. No rodaron cabezas en el grupo Prisa por la cobertura informativa del 11 al 14-M. Es más, en junta general de accionistas de abril de 2004, Polanco expresó su reconocimiento a los profesionales de El País, la SER y CNN+ por “su comportamiento en estas tensas y difíciles jornadas, por su dedicación, por su sentido de la responsabilidad y por el excelente trabajo desplegado”.
“Los injustificados y sectarios ataques de que fueron objeto” -añadió-, “por el simple hecho de haber servido a la verdad, sólo ponen de relieve la pequeñez moral de algunos sectores sociales, que aun pronunciándose con mucho ruido, no dejan de ser marginales”.
Y para que las palabras no se las llevara el viento, el jurado de los 51 Premios Ondas, que otorga la SER, galardonó el pasado octubre a sus propios servicios informativos por la labor informativa de aquellos días tremendos.
La réplica de la derecha al premio llegó a través de Aznar. Durante su comparecencia en la comisión de investigación del 11-M, el ex presidente del Gobierno dijo que aquello era como decir “miente, miente lo más miserablemente que puedas, todo lo que se te ocurra, con tal de servir a la causa, que serás recompensado e igual hasta te llevas un premio”.
Pero seguía sin atreverse a poner nombre y apellidos a ese “poder fáctico fácilmente reconocible” llamado Polanco. Ya en 1985 dijo Emilio Romero que Jesús Polanco era de los pocos hombres capaces de “glorificar, putear, encumbrar, descalificar, chulear, animar y amedrentar a una clase política entera”. Y tenía razón el gallo del franquismo.
De los grandes magnates de la prensa española, sólo a él cabe compararle, sin tropezar en la caricatura, con Ciudadano Kane, trasunto de William Randolph Hearst, interpretado por Orson Welles. Su poder es enorme. Abarca desde medios de comunicación hasta entidades financieras, pasando por sellos editoriales, agencias de viaje y publicidad, productoras de cine y música, y hasta cadenas de librerías, de bares, de hoteles y de hospitales.
Mucho se ha escrito (Federico Jiménez Losantos lo hizo en el epílogo de La dictadura silenciosa) sobre la posibilidad de nacer, crecer, reproducirse y morir en España bajo el influjo de este madrileño naturalizado cántabro.
Por eso, dicen, para redondear su negocio, a Polanco sólo le faltaría una compañía de pompas fúnebres. Y puestos a pedir una funeraria, por qué no un partido político. Aunque hay quien apunta que ya lo tiene: el PSOE. Para demostrarlo se atribuye a Rubalcaba la siguiente frase: “Prisa no es del PSOE, pero el PSOE si es de Prisa”.
Cierta o no la autoría, el portavoz parlamentario socialista niega ser el hombre del partido en el grupo, o del grupo en el partido. Sometido el flanco izquierdo, Polanco ha puesto proa al derecho: el PP.
De momento ha conseguido que sus dirigentes (no sus militantes) teman más un editorial de El País que el diagnóstico de un oncólogo. Y aunque el partido fundado por Manuel Fraga Iribarne no sea propiedad de Polanco, hubo momentos en los años de Aznar en que lo pareció.
Como muestras, hay botones para coser una casaca. Ahí van tres: las gestiones para que Janli Cebrián no ingresara en la cárcel por el caso Sogecable; la indolencia para hacer cumplir la sentencia del Supremo que obligaba a la SER a vender las emisoras ilegalmente adquiridas tras la compra de Antena 3; y la entrega a don Jesús del monopolio de la televisión digital.
Ante tanta merced Polanco supo corresponder con creces informando puntualmente de las manifestaciones de acoso a las sedes del PP la jornada de reflexión del 13 M. Quizás por eso los políticos de la derecha bajan avergonzados la mirada cada vez que en sus mítines las bases corean “¡Grupo Prisa, España no se pisa!”.
Porque saben que su cobardía ha sido causa del reclutamiento forzoso en los cuarteles del invierno mediático. Pero no todos agachan la cabeza. Hay uno que mira con abierto desdén a sus simpatizantes; simpatizantes que, por cierto, son los que le han hecho ganar por mayoría absoluta elección tras elección.
Es Alberto Ruiz-Gallardón, el hombre con quien sueña Polanco para liderar a la derecha. En él tiene puestas todas sus esperanzas. Y es que Polanco y Gallardón son amigos. Pero el lugar para hablar de esta amistad no es éste, sino el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
[Fuente: Por Gonzalo Altozano, Revista Epoca, Madrid, 27jun05]
http://www.derechos.org/
La MULTINACIONAL PRISA de JESÚS de POLANCO VIOLA la LEY y PERSIGUE a PERIODISTAS en BOLIVIA
La cadena internacional de medios de Difusión “PRISA” “penaliza” en Bolivia el “anuncio” de huelga, la actividad gremial y el fuero sindical de los periodistas, y no respeta las leyes bolivianas. Frente a estos hechos, en defensa de sus derechos y siguiendo el ascenso social de los trabajadores bolivianos, los periodistas sindicalizados han lanzado la consigna de “nacionalizar” las multinacionales de la comunicación, que se asentaron en el país de forma “solapada”. La guerra está declarada...
Miguel Pinto Parabá
http://www.fluvium.org
El terrorista que mató a Aznar
Miguel Salazar / Semanario Las Verdades de Miguel No.1 (Venezuela) - 26/03/04
Una conseja recorre al viejo Madrid, entre las letanías del fascismo decadente y la modernidad del terrorismo etarra: echando mano del ejemplo que en Caracas dieron las empresarios de la comunicación, al emperador de los medios españoles sólo le bastaron 24 horas para derrocar a José María Aznar sin disparar un tiro. Cuidado que la nueva subversión tiene en la mira a Venezuela.
La fortuna del nuevo dueño de Telcel alcanza cifras siderales en billete americano. Se trata del amo y señor de las almas españolas. Don Jesús Polanco y Blanco, como se le conoce con apellidos de abolengo incorporado, viene desde hace tiempo extendiendo sus tentáculos capitalistas por toda América Latina. De continuar su escalada como va, no está lejano el día cuando nos levantaremos con la familiaridad del acento ibérico tomando asiento en nuestros desayunos.
Entre los vericuetos del más moderno imperio de la información castiza, en el abigarrado mundo de sus propiedades, el amo de Telefónica ha resultado el verdadero artífice de la derrota del Partido Popular en España, José Aznar (enconado enemigo mediático de Hugo Chávez Frías) ha sufrido en carne propia el efecto del poder de la comunicación utilizado de manera perversa.
Por primera vez en la historia nacional los dueños de los medios de comunicación encuentran un verdadero peligro amenazando la libertad de informar, la libertad del editor y de todas las otras armas de los amos de la comunicación criolla y no es precisamente Chávez el motivo de la inqutetud empresarial. Se trata de Jesús Polanco, un español de antiguos devaneos con los tupamaros uruguayos y el extinto, argentino, Ejército Revolucionario del Pueblo. De aquel Regis Debray latino solo queda la sombra y hoy representa la pujanza del empresario sin escrúpulos, ejempto vivo del llamado liberalismo salvaje.
Nadie sabe cómo comenzó Polanco los riesgos de la aventura que lo elevó a la cúspide de los faraones de la comunicación y mucho menos cómo llegó a constituirse en una amenaza más seria que la representada por Bin Laden extrapolado a los predios de la información.
En realidad, Jesús Polanco se ha revelado en toda su dimensión de "terrorista comunicacional" y no es una exageración afirmar que haría morir de envidia hasta los más connotados extremistas de ese partido virtual que ha resultado la televisión privada. Polanco ya no puede ser un secreto y así ha quedado manifiesto desde el mismo momento cuando la terrible tragedia del plástico explosivo político detonó en el subterráneo madrileño la mañana del pasado 11 de marzo. A sólo horas de las elecciones españolas, las bombas de los nuevos cruzados del fanatismo le sirvieron de espoleta a Polanco para librar una onda expansiva que le daría la vuelta a la tortilla en el panorama político español, que para ese momento resultaba abiertamente favorable a Jóse María Aznar frente a su adversario José Rodríguez Zapatero del PSOE.
Aún no hemos llegado al esplendor del escándalo que tarde o temprano desatará la ambición de Jesús Polanco, pero la consigna "Que el Gobierno diga la verdad", es apenas el inicio del mando supremo en lo que queda del mundo socialista español.
El diario El País fue autorizado por Francisco Franco, a su dirección llega Polanco de la mano de Manuel Fraga. El futuro zar de la comunicación negoció con Franco y Pinochet la construcción de su imperio de libros de texto. Polanco ha mantenido contacto permanente con los principales foros de decisión del neocapitalismo internacional. Desde el mismo momento cuando arribó el primer Gobierno socialista español tejió la red de sus negocios que giraron en tomo a la publicidad estatal, la concesión fuera de plazo de la televisión codificada, la concentración radiofónica de la Cadena Ser y Antena 3 Radio.
El zar de la comunicación ha ejercido su oficio de manera férrea. Comenzó fijando las reglas del juego: los columnistas de El País se pueden meter con la Iglesia, el Gobierno o la monarquía, pero no to pueden hacer con El Corte Inglés ( la empresa de España que más invierte en publicidad).
La banca internacional le ha financiado créditos de hasta un mil millones de dólares. Pero si el mundo está a los pies de don Jesús, su fama de malagradecido ha crecido entre sus amigos. Mucho más ahora después de jugarle una mala pasada a José María Aznar, cuyo Partido Popular antes le había permitido la fusión de las Cadenas Digitales, Canal Satélite y Sogecable, con unas excelentes condiciones, al tiempo que aprovechaba para fortalecer sus alianzas con Aol-Time Warner, Rupert Murdoch y Tetevisa.
La falta de escrúpulos a la hora de sacrificar a sus amigos le ha permitido al Grupo Prisa (casa matriz de Jesús Polanco), protagonizar una importante subida en el parqué madrileño. En lo que va de año, el valor de sus títulos se incrementó 27,20 por ciento, casi el triple que el ibex-35. Sólo en el último mes, las acciones de Prisa subieron 34,53 por ciento. Los inversores también han sabido apreciar las buenas noticias que para la empresa de Polanco se han desprendido de la actuación del gobierno. Si hace apenas seis meses el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, anunciaba la inminente ilegalización de la red de emisoras locales de Prisa y Localia TV, ahora la situación es bien distinta; no sólo mantiene sus participaciones en Canal Plus y Localia (algo que estaba prohibido por ley) sino que además el gobierno de Aznar le permitió, a través de una enmienda de la ley de telecomunicaciones, la emisión de la programación en cadena en la red local de Prisa. Son conocidos sus lazos con el presidente argentino, Néstor Kirchner, a quien frecuenta acompañando en su nostalgia por los rnontoneros y revolucionarios, pero, por supuesto, sin la pobreza rancia cue acompañó aquella época.
Mientras, el editor español, que se jacta de ser un hombre progresista, ya no cree en la revolución social y cuando se la mencionan responde con grandes carcajadas. Don Jesús se dejó de sueños y se siente muy a gusto con el capitalismo: su filosofía más profunda es el libre mercado, pero en realidad es un amante del monopolio, por eso se entiende a las mil maravillas con Kirchner, quien además es un fanático lector de El País, el buque insignia de don Polanco.
La Casa Rosada le abrió las puertas de Argentina, de la misma manera que Felipe González (su mejor agente comercial) se la ha abierto en el México de Vicente Fox. Pero es tal la comunidad de intereses con el mandatario argentino que Polanco le solicitó su ayuda para adquirir Radio Continental. Kirchner no sólo te dio la mano sino que lo entusiasmó para que pusiera en marcha un diario en Argentina. En este momento, Polanco posee más de mil emisoras de radio en toda América Latina. El emperador de la guerra mediática considera que con su presencia en México, en Colombia (Radio Caracol) y Argentina, está preparado para incursionar en Venezuela, donde más de un editor importante está al borde de la quiebra. El eje Kirchner-Polanco no es sino una alianza mercantil y política. En ese sentido no se puede hablar de ideología, sino de poder y de dinero. En el portafolio de Polanco viene la descornposición de la unidad nacional, el envilecimiento de las instituciones y el freno a la posibilidad de regenerar la política y el Estado. Se trata pues de la intención de crear y fomentar la corrupción en la cumbre, la podredumbre de la justicia, y la anemia moral de los medios de comunicación de masas. Todo ello conduce a la desintegración de las reúblicas latinoamericanas.
El Grupo Prisa tiene relaciones con el venezolano clan Cisneros, ambos comparten una fuerte vinculación con las sociedades masónicas más atrasadas de Europa, con la llamada masonería irregular. Probablemente, el jefe del clan venezolano haya sido incorporado por Jesús Polanco porque anteriormente no se le conocian esas inclinaciones. Pero, lo cierto es que tanto Cisneros como Polanco le imprimen el sello masónico a sus medios de comunicación social. Digamos que practican una masonería invisible, por cuanto desarrollan actividades aparentemente ajenas a la masonería, pero a impulsos de los proyectos e ideal masónicos, aunque abiertas ordinariamente a no masones, su "filosofía" y sus directrices son masónicas.
Es muy probable que sus nexos los lleven a una sociedad secreta conocida como orden skull and bones (orden de la calavera y de los huesos), cuyo emblema es una calavera con dos huesos cruzados. En los últimos tiempos es llamada casi a secas: the order. Se trata de una hermandad fundada en la Universidad de Yate en 1832. Es una orden masónica independiente, es decir, no está inscrita en ninguna gran logia regular.
Jesús Polanco es amigo de Felipe González y ha usufructuado ese nexo para lograr la expulsión de jueces que no le son afectos en la carrera judicial, además ejerce un control estricto sobre el PSOE, y, en general, sobre la opinión llamada "progresista" en España.
No en balde Jesús Polanco se ha transformado en don Jesús de Polanco y Blanco. Todo depende de cómo se escriban los apellidos para saber de quién se trata la persona en una sociedad de trazos monárquicos. La influencia del "don" se extiende como accionista de hoteles, funerarias, agendas de viajes, librerías, editoriales, gabinetes sociológicosy bancos.
Curiosamente pocas personas saben quén es este buen señor ya que siempre ha permanecido en un segundo plano en cuanto a la popularidad, que no influencia, social. A pesar de ser una persona muy poco conocida para el gran público, su presencia en la vida cotidiana de los españoles medios es abrumadora.
Ya señalamos que don Jesús Polanco y Blanco hizo fortuna durante el franquismo, cuando el dictador le otorgó a dedo la exclusiva de libros de texto a la Editorial Santillana. Pero donde afianzó su poder fue durante la década de los 80, con la llegada al Gobierno de Felipe González. Entonces se hizo célebre la frase: "Felipe es Dios y Polanco su profeta". En ese tiempo el Grupo Prisa se convirtió en el primer defensor del gobierno de González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que se construyó bajo su mandato. La crítica a Polanco no es que sea rico o que tenga éxito en los negocios, no, se le cuestiona la forma cómo se ha enriquecido o ha hecho negocios, ayudado siempre desde el poder y con ventaja respecto a los otros competidores. Su modelo empresarial es el monopolio, no el libre mercado.
El gobierno le vendió a un precio irrisorio la cadena Ser (una red de radio que cubría todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar la competencia (el antenicidio); se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. Se trata del Canal Plus, el cual generó una fuente inmensa de beneficios para Polanco, por no contar además con una competencia posible. De tal manera que Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía, tuvo en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia en la sociedad es enorme al contar con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y privados.
Quien osara enfrentarse a su poder se estrellaría ante un colosal muro. Desde el Grupo Prisa se produjo la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción socialista. Así se acallo a los medios críticos e independtentes.
Durante años el PSOE se dedicó a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco, quien se convirtió en todo un auténtico emperador, con la capacidad de decidir de modo arbitrario sobre los diversos aspectos de la vida española. Dominó, según su conveniencia con mano firme un imperio mediático que se hizo del control absoluto de la información en España. Utilizó para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral. Conociendo su existencia es una tarea básica para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del Estado durante la década del PSOE.
La llegada al poder de José Marta Aznar y del Partido Popular constituyó una gran derrota para don Polanco. Desde entonces hizo todo lo que tuvo a su alcance para desacreditar a los dirigentes del PP. Bajo el gobierno de Aznar, el Grupo Prisa dejó de recibir la protección y la exclusividad que el PSOE le confirió en sus negocios. Ahora, cuando la venganza tiene un dulce sabor, Jesús Polanco sólo tiene una coincidencia con su adversario derrotado: cruzando el Atlántico, su hermano masón requiere de su ayuda.
http://www.soberania.org
¿Quién es el tal Polanco?
Tacuari
Agencias/Insurgente
Un tal Francisco Franco firmó de la mano de Fraga la autorización del diario El País... Hoy, entre las personas más influyentes del Estado Español en las últimas décadas, encontramos en lugar preeminente a don Jesús "de" Polanco Blanco [el nobiliario "de" es nuevo]. Es el amo del grupo PRISA.
Controla medios de comunicación como Canal Plus, la Cadena Ser; radios musicales como Cadena Dial, Los 40, Radio Olé. También controla periódicos como el citado El País, As, Cinco Días, así como prensa regional y local... Su influencia se extiende, como accionista (en algunos casos mayoritario) a hoteles, funerarias, agencias de viajes, librerías (Crisol), editoriales, gabinetes sociológicos, bancos, industria del cine...
Donde se afianzó su poder e influencia fue durante la década de los 80, con la llegada al poder de Felipe González. La frase “Polanco es Dios y Felipe su profeta...”, sintetiza perfectamente el papel jugado por Polanco durante el felipismo. El grupo PRISA se convirtió en el adalid y defensor del gobierno González y de todo el turbio entramado empresarial y económico que coexistía en torno a él. A cambio recibió todo tipo de prebendas, compensaciones económicas y privilegios.
El gobierno de Felipe González le vendió a un precio ridículo la CADENA SER (cadena de radio que tenía una red espectacular de emisoras que cubrían todo el territorio español). Después de fracasar en el libre mercado radiofónico, optó con la ayuda del gobierno felipista por destrozar a la competencia (el antenicidio). Se le otorgó a dedo un canal de pago (el único) que además tenía la exclusiva del fútbol los domingos. El Canal Plus era una fuente inmensa de beneficios para Polanco y que además no tenía competencia posible.
El gobierno de Felipe González y toda la oligarquía financiera que lo sostenía tuvieron en Polanco su principal soporte publicitario y mediático. Su influencia en la sociedad fue enorme al contar, en sus acciones, con el apoyo abrumador de todos los medios de comunicación públicos y la inmensa mayoría de los privados (quien osara enfrentarse al poder, lo pagaría caro...). Desde el Grupo Prisa se produjeron la descalificación y el linchamiento mediático de las personas que se atrevían a poner en duda o a criticar algún aspecto de la corrupción felipista. Se intentó acallar los medios críticos e independientes. El felipismo necesitaba un escudo protector... Ese fue el Grupo PRISA. Incluso Juan Luis Cebrián, el hombre de El País y otros veintiséis editores de periódicos y revistas europeos pedían al máximo órgano político de la Comunidad Europea la desregulación de las normas sobre concentración de medios de comunicación. El ex comisario europeo responsable de la Competencia, Karel Van Miert, asegura en su libro “El Mercado y el poder” que en el último Gobierno de Felipe González, Solana y Solbes (acusado de corrupción en el caso Eurostat) le presionaron para que favoreciera a PRISA e ignorase la posible ilegalidad de su alianza con Telefónica en la sociedad de Cablevisión.
La firma de acuerdos con casi todos los gobiernos de Iberoamérica ha catapultado a Jesús de Polanco, que ya controla el mercado de la comunicación en Iberoamérica. La conquista latinoamericana de Prisa se inspira en la misma política de hechos consumados que ya utilizó en España en Antena 3 Radio. Polanco trató de hacerse con el diario La Nación, tras mantener varios encuentros con el presidente de Chile, Ricardo Lagos, en compañía de Felipe González... Su empresa esta extendida en México, Bolivia, y otros muchos empresarios progresistas, viajan a España con asiduidad buscando el apoyo financiero del super jefe.
Durante años el partido denominado socialista y obrero se dedicó a salvaguardar los negocios, chanchullos y cambalaches de Polanco. Convertido en todo un señorito de los de antes, con todo un partido político como el PSOE a su servicio, don Jesús de Polanco, convertido por el felipismo triunfante en auténtico emperador, con una capacidad de decidir sobre los diversos aspectos de la vida española de modo arbitrario y según su conveniencia, domina con mano firme un imperio mediático que aspira a tener el control absoluto, el monopolio, de la información en nuestra sociedad; utilizando para ello todos los recursos posibles, por encima de cualquier planteamiento ético o moral... La existencia de este auténtico imperio del monopolio es básico para comprender la impunidad y despreocupación con que algunos saquearon y corrompieron las instituciones del estado durante la década larga del felipismo.
Elecciones Generales: PRISA y PP
Es verdad que el Gobierno del PP mintió durante la guerra de Iraq y ocultó a los autores del atentado del 11M consciente de la gravedad para sus resultados electorales. Pero también es verdad que la campaña que desde la CADENA SER, CNN + y El País se hizo durante “el día de reflexión” de las pasadas elecciones generales fue una manipulación de la opinión pública y una falta de una mínima ética democrática al instrumentalizar el atentado terrorista para favorecer a la opción política del PSOE...
Polanco dijo que le daba lo mismo quien ganara estas últimas elecciones con tal que no fuera Aznar. El ganador de estas elecciones es el grupo PRISA. El PSOE, más que nunca, está en manos de Polanco.
Polanco contribuyó también a construir el propio Partido Popular. El Gobierno del PP ha hecho a Polanco en la pasada legislatura numerosos favores. Autorizó primero la fusión entre Sogecable y Vía Digital. Cambió después, de criterio en la “Ley de Acompañamiento” para regularizar las emisoras locales de TV de Prisa (Localia) y el Gobierno Popular ha venido boicoteando durante casi cuatro años la ejecución de la sentencia del Tribunal Supremo, que establecía como contraria a derecho la absorción de 81 emisoras de Antena 3 y Radio por la Ser y, por tanto, obligaba a deshacer la operación.
En marzo de 2001 apareció publicada la lista de las 100 mayores fortunas de España que la revista Actualidad Económica realiza todos los años. Polanco con sus casi 400.000 millones de pesetas era ya uno de los hombres más ricos de España y por supuesto de los más poderosos.
Jesús Polanco y Juan Luis Cebrián, dos franquistas conversos al felipismo, no dudan en hacer negocio con porno duro en su televisión codificada y hacer pingües beneficios con, por ejemplo, la prostitución (el periódico de mayor número de anuncios de prostitución de toda la prensa española: El País).
http://www.rebelion.org
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