Israel Winicki
isi_winicki@hotmail.com
Fuente: www.porisrael.org http://desdeisrael.com
Se ha decretado por ambas partes el cese el fuego en Gaza, por ahora los cañones han sido llamados a silencio.
Según las cifras extraoficiales que se manejan, el poderío militar de Hamas ha sido destruido, muchos de sus miembros han muerto o desertado, y, lo que es más importante, muchos de los dirigentes de la organización han sido muertos.
Israel ha logrado sus objetivos, detener el bombardeo desde Gaza contra el sur del país y un compromiso por parte de Egipto, Reino Unido, Alemania, Francia, ONU y los EEUU para detener el contrabando de armas desde Irán hacia Gaza.
Dejemos de lado las declaraciones de los dirigentes terroristas y sus protectores, que proclaman una victoria militar inexistente y, todavía, se dan el lujo de imponer condiciones.
Pasemos a otra guerra en la que SI vencieron los terroristas.
Mediante la exhibición obscena de cuerpos de niños y mujeres destrozados por los bombardeos (destrozados porque los "héroes" de Hamas los utilizan como escudos), mediante reportajes montados en los que habitantes de Gaza relatan las "brutalidades" de los soldados israelíes, montaron una campaña mediática, como es su costumbre.
Y entonces, con el apoyo de los nazis de siempre, nostálgicos de los viejos tiempos en que la svástica señoreaba en Europa y de los izquierdistas progres que son incapaces de ver más allá de sus propias narices y de su odio a los EEUU, más la colaboración de periodistas mercenarios, dispuestos a venderse al mejor postor, provocaron una oleada de manifestaciones anti israelíes, que, en la mayoría de los casos, degeneraron en hechos de violencia, destrozos, ataques personales y hasta atentados.
España, Francia, Italia, Inglaterra, Noruega, Alemania, Argentina. En todo el mundo el panorama es el mismo: quema de banderas israelíes, ataques contra sinagogas, viejos slogans nazis entremezclados con vivas al terrorismo (poco importa que Londres, Madrid, Buenos Aires, Paris, hayan sufrido en carne propia el accionar de esos terroristas que los manifestantes saludan como "combatientes por la liberación").
Mientras tanto, mientras los soldados caen en combate; mientras los israelíes que vivimos en el sur vivimos pendientes de la alarma `por ataque con misiles; mientras las turbas de todo el mundo pide a gritos un nuevo Holocausto. ¿Qué hacen los judíos? ¿Dónde están los esclarecidos intelectuales que se enorgullecían de su herencia? ¿En qué madriguera se ocultan los dirigentes de los inflamados discursos en apoyo a Israel? ¿Dónde está la juventud que en otros tiempos salía a la calle enarbolando orgullosos las banderas de Israel? 500 personas en un acto privado y a puertas cerradas en Buenos Aires para contrarrestar a las turbas piqueteras de D´Elia y Bonafini, que se han apoderado de las calles de la ciudad con sus consignas de odio. 3000 personas en Madrid para contrarrestar a los cientos de miles de musulmanes que se manifiestan codo a codo con los idiotas útiles del PP y el PSOE, pidiendo la desaparición de Israel. Y así podría seguir país por país. Frente al odio desatado, la cobardía; frente a la mentira mediática, el miedo a mostrar la verdad; frente a la propaganda bien orquestada y bien pagada, el "no te metas".
Si, aunque en Gaza no se logró la liberación de Guilad Shalit y Hamas no fue destruido del todo, Israel triunfó. Pero como siempre, frente al mundo, Hamas venció con su propaganda, con sus mercenarios, con sus idiotas útiles y con la cobardía e indiferencia de los propios judíos.
Fuente: www.porisrael.org http://desdeisrael.com
Se ha decretado por ambas partes el cese el fuego en Gaza, por ahora los cañones han sido llamados a silencio.
Según las cifras extraoficiales que se manejan, el poderío militar de Hamas ha sido destruido, muchos de sus miembros han muerto o desertado, y, lo que es más importante, muchos de los dirigentes de la organización han sido muertos.
Israel ha logrado sus objetivos, detener el bombardeo desde Gaza contra el sur del país y un compromiso por parte de Egipto, Reino Unido, Alemania, Francia, ONU y los EEUU para detener el contrabando de armas desde Irán hacia Gaza.
Dejemos de lado las declaraciones de los dirigentes terroristas y sus protectores, que proclaman una victoria militar inexistente y, todavía, se dan el lujo de imponer condiciones.
Pasemos a otra guerra en la que SI vencieron los terroristas.
Mediante la exhibición obscena de cuerpos de niños y mujeres destrozados por los bombardeos (destrozados porque los "héroes" de Hamas los utilizan como escudos), mediante reportajes montados en los que habitantes de Gaza relatan las "brutalidades" de los soldados israelíes, montaron una campaña mediática, como es su costumbre.
Y entonces, con el apoyo de los nazis de siempre, nostálgicos de los viejos tiempos en que la svástica señoreaba en Europa y de los izquierdistas progres que son incapaces de ver más allá de sus propias narices y de su odio a los EEUU, más la colaboración de periodistas mercenarios, dispuestos a venderse al mejor postor, provocaron una oleada de manifestaciones anti israelíes, que, en la mayoría de los casos, degeneraron en hechos de violencia, destrozos, ataques personales y hasta atentados.
España, Francia, Italia, Inglaterra, Noruega, Alemania, Argentina. En todo el mundo el panorama es el mismo: quema de banderas israelíes, ataques contra sinagogas, viejos slogans nazis entremezclados con vivas al terrorismo (poco importa que Londres, Madrid, Buenos Aires, Paris, hayan sufrido en carne propia el accionar de esos terroristas que los manifestantes saludan como "combatientes por la liberación").
Mientras tanto, mientras los soldados caen en combate; mientras los israelíes que vivimos en el sur vivimos pendientes de la alarma `por ataque con misiles; mientras las turbas de todo el mundo pide a gritos un nuevo Holocausto. ¿Qué hacen los judíos? ¿Dónde están los esclarecidos intelectuales que se enorgullecían de su herencia? ¿En qué madriguera se ocultan los dirigentes de los inflamados discursos en apoyo a Israel? ¿Dónde está la juventud que en otros tiempos salía a la calle enarbolando orgullosos las banderas de Israel? 500 personas en un acto privado y a puertas cerradas en Buenos Aires para contrarrestar a las turbas piqueteras de D´Elia y Bonafini, que se han apoderado de las calles de la ciudad con sus consignas de odio. 3000 personas en Madrid para contrarrestar a los cientos de miles de musulmanes que se manifiestan codo a codo con los idiotas útiles del PP y el PSOE, pidiendo la desaparición de Israel. Y así podría seguir país por país. Frente al odio desatado, la cobardía; frente a la mentira mediática, el miedo a mostrar la verdad; frente a la propaganda bien orquestada y bien pagada, el "no te metas".
Si, aunque en Gaza no se logró la liberación de Guilad Shalit y Hamas no fue destruido del todo, Israel triunfó. Pero como siempre, frente al mundo, Hamas venció con su propaganda, con sus mercenarios, con sus idiotas útiles y con la cobardía e indiferencia de los propios judíos.
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